Saúl no peleará

Lejos de la situación tan sospechosa y bochornosa que está viviendo el pugilato rentado, la realidad es que la pelea programada el 5 de mayo entre Gennady Golovkin y Saúl Álvarez no se hará y está pospuesta probablemente hasta septiembre.

No hay nada positivo que salvar de esta situación y mucho menos la forma en la que el equipo de Golden Boy canceló el compromiso, argumentando que después de la audiencia que tienen con la Comisión Atlética de Nevada, si fuese positivo en favor de Saúl, ya no habría tiempo de promover la pelea cuando todos sabemos que tenia más promoción que mi querida ‘Mamá Lucha’.

Castigo ejemplar

En dado caso de que se le compruebe de forma oficial trampa y abuso en el uso de sustancias prohibidas a Saúl Álvarez, el jalisciense tendrá que ser castigado de forma ejemplar. No deberá quedar un solo resquicio de duda sobre la autoridad por parte de los organismos y las comisiones que rigen el boxeo mundial.

Y en caso de aceptar que hubo intención en tomar ventaja de una forma poco ética, la suspensión puede ir mínimo de seis meses hasta dos años de inactividad.

Recuerdo cuando hace algunos años le comprobaron a Antonio Margarito y a su entrenador, Javier Capetillo, el usar yeso en las vendas, la suspensión fue por un año sin pelear, algo tipo este castigo tiene que imponerse al mexicano en caso de ser culpable.

Credibilidad

Cuando ya el boxeo estaba recuperando cierta credibilidad a nivel internacional, viene un escándalo de dopaje, el cual, lejos de continuar con el buen camino retomado, rompió con todo el esquema. Es por eso que la sanción tendrá que ser al nivel de este escándalo.

Y no sólo el boxeo es golpeado, sino la carrera de Canelo, cuya credibilidad siempre ha estado en duda. Los millones seguirán llegando a su cartera, pero el orgullo y la dignidad de Álvarez están en juego. Él -por obvias razonesdeclaró que está limpio y nunca ha incurrido a sustancias prohibidas, ahora habrá que demostrarlo no con los puños, sino con exámenes clínicos. Y como diría Juan Gabriel ‘¿pero qué necesidad?

Todos pierden

En dado caso de que la función siga en pie, para ‘la fecha más mexicana de Las Vegas’, Golovkin y Tom Loeffler, el hombre que lleva su carrera, aún no han encontrado rival para continuar con la promoción.

Hoy por hoy pierde todo el boxeo, Canelo, ‘GGG’, los hoteles, las aerolíneas, las televisoras, los casinos, Las Vegas y, sobretodo, la afición. Todos pierden.