Cruz Azul pierde su grandeza

A la grandeza hay que darle mantenimiento. Se vive. También se sufre. Hay que hacerla durar, no es un título nobiliario que se adquiere un día y tiene patente eterna, hay que refrendarlo constantemente, con muchos requisitos, los básicos: convencer a la enorme afición con estilo y episodios memorables en el campo, consolidar nuevos futbolistas entre la élite, sobre todo, ganar, particularmente títulos importantes. 

América, con todo y su polémico Centenario, es el que ha revalidado de mejor forma la grandeza en nuestro país; Chivas va, recupera la memoria y está cerca; Pumas lo ha hecho con frecuencia más palpable. El único que no lo ha logrado, el cuarto fantástico de nuestra Liga al que le faltan los sellos actuales en el carnet de grandeza es Cruz Azul, un monstruo que ha quedado en el pasado y cuyo glorioso recuerdo cada torneo queda más y más lejano.

El ridículo que selló el club cementero este fin de semana, acuchillado por el árbitro, pero sobre todo, por sus errores de todo el torneo y falta de carácter en los momentos decisivos, aumentó a niveles insoportables la urgencia de revalidar esa grandeza.

Cruz Azul: cambia ya, renuévate, pero no sólo al plantel, como cada torneo, fichajes que parecen responder más a negocios que a esa búsqueda de la gloria perdida, tampoco basta con transformar el banquillo, cambia de verdad, cambia desde la cabeza. Hazlo ya, que urge revalidar tu grandeza, esa que hoy muchos ya cuestionamos.

La búsqueda del DT azul

Hoy, la apuesta de Billy Álvarez es que el Ingeniero Moreno termine el torneo. Tendrán mucha calma. 

Les cuento cómo va la búsqueda. Por Cardozo aún no hay contacto, pero tiene buena relación desde aquella lejana participación en la Libertadores de 2001. Por cierto, en Chiapas no sólo le deben a los jugadores, pues al cuerpo técnico de Saturnino tampoco le han liquidado desde su salida.

Descarten de una vez al ‘Potro’ Gutiérrez, pues tiene otros planes que ya les contaremos en estas páginas.

Es cierto que Yayo de la Torre comió con Romano, fue la gran opción a mitad de torneo y hoy renace, pero ya no es prioridad. 

Así, viene la danza de nombres en La Noria. Veamos.