El amo del tablero gana la partida

Sacrificar para ganar. Un arte en el ajedrez: entregar una pieza a cambio de otra ventaja. Arriesgarse para asumir entonces la iniciativa, en busca de la victoria en la partida.

La ofrenda es Aguilar y Triverio, el aumento de su castigo, al fin ejemplar. Turno del oponente.

“A pesar de que el sacrificio da ventaja material al rival, éste se ve obligado a realizar movimientos que se salen de su plan, lo que conduce a que su posición se vuelve desordenada”, explicaba Rudolf Spielmann, brillante jugador austriaco del siglo pasado, apodado ‘El amo del ataque’.

Hoy, los árbitros tendrán lo que querían, sanciones acordes a la ofensa recibida por sus miembros. Entonces, no hay opción de movimientos: levantarán el paro ante la satisfacción de sus demandas. Así, tendremos Copa y Liga. Pero esto no es lo que conforma todo el triunfo.

No pierde el amo del tablero

La asociación de árbitros defiende a las piezas negras. ¿El rival? No es la FMF. Su oponente es más grande. Decio de María se encarga de mover, es la mano visible, pero es el amo del tablero, su jefe, el que decidió sacrificar para ganar esta partida.

Ante la revuelta de los silbantes, un grupo de dueños ha visto una oportunidad de mermar el gran poder de la cabeza del futbol mexicano: tratan de  que su operador en Femexfut pague por las pérdidas. Pero no han podido. 

Lograron que De María quede mal parado con sus jefes, se han dado cuenta “que no tiene la mano dura de Compeán”. Pero no como para moverlo.

Será González Iñárritu otro sacrificado, pues fue quien mandó un mensaje de control ante la amenaza arbitral, sin que fuera real, y falló para frenar el paro. Sólo un milagro lo salvaría para seguir al frente de la Comisión Disciplinaria. Es más, ya empezaron a buscarle reemplazo.

Lograron hacer enojar al jefe, que al final hizo que entrara en razón su gran socio, y le bajaron intensidad a la revuelta.

La próxima partida: los derechos de transmisión de la Selección Mexicana. Te anticipo: se pondrá en la mesa la diversificación, que entren más jugadores, pero sin que Televisa ni TV Azteca pierdan privilegios. Será una nueva batalla en el tablero en el que juegan muchos, más que antes, con gran peso, pero que aún pertenece al amo.