La Final

Sin luces, pero con la jerarquía que sólo tienen los grandes equipos en momentos cumbre, es como este Real Madrid buscará otra título más de Europa.

De la mano, literal, de un enorme Keylor Navas, el ultra discutido guardameta costarricense, la escuadra merengue encontró refugio en sus goles como visitante y después debió sufrir como una madre en casa dejando para incluso al azar situaciones arbitrales que dejaron en sus detractores tela por todos lados.

Benzema, otro elemento repleto de murmullos, encontró un bálsamo a su malaria particular de cara a gol y quedó saneado para el juego en Kiev, donde nuevamente buscará ser el escudero de siempre de un Cristiano Ronaldo hambriento de protagonismo en la gran cita europea.

Enfrente estará un Liverpool con estirpe copera, como dictaminan sus pergaminos continentales. Una escuadra sin balance que tiene en su tridente ofensivo la gran arma para tratar de trascender en Ucrania.

El problema de la escuadra inglesa es su endeble estabilidad defensiva que estuvo a nada de colapsar en Roma.

El 26 de mayo, Real Madrid saldrá como amplio favorito para seguir dominando su torneo, mientras que el Liverpool intentará otra vez ganar un certamen mucho más complejo, pero que desde hace rato y de manera increíble es mucho más cercano que la Liga Premier, evento que no consigue desde hace 28 años.