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Opinión

Christian Martinoli

Uno de los mejores cronistas deportivos en México, trabaja para TV Azteca y ha colaborado con RÉCORD desde 2010.

Malaria final

2018-10-30 | Christian Martinoli
CHRISTIAN MARTINOLI
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Lo que Cruz Azul carga desde hace rato como su propia cruz, en el norte los Rayados son un símil cementero en cuanto angustia sin triunfos determinantes se refiere.

La Copa es el bálsamo que algunos usan cuando no les alcanza en la Liga; incluso, estos dos clubes de enorme presupuesto han podido, dentro de su sequía liguera, alzar por lo menos el trofeo tricolor.

Los que no lo ganan lo desdeñan, pero los que lo consiguen lo disfrutan y exaltan. Ley de vida y de burla deportiva; ley del futbol mexicano y su exótico peregrinar.

El miércoles, la flamante casa del Monterrey tiene un duro misterio que todavía no termina por descifrar el cuadro local, un caprichoso aire que no deja respirar en calma a sus inquilinos que no han podido expresarse en momentos de alta gama al máximo nivel.

A esa cancha se meterá un cuadro celeste urgido de gloria, que aunque ya supo hace cinco años solventar una Final de este certamen ante el Atlante.

Cruz Azul vive hace más de dos décadas con cinco golpes fulminantes en la Liga que lo dejaron en la puerta del título más grande que ofrece el futbol nacional.

Rayados, desde su irrupción definitiva en el protagonismo de la Liga MX, ha acumulado tres títulos en este siglo, pero desde el 2010 ha perdido una tercia de finales; la más dura, con Tigres y de local.

La Copa le viene bien a cualquiera de estos dos equipos; porque uno quiere que se respete su nuevo estatus de club importante en el concierto nacional y el otro desea que no se olvide su grandeza ganada con títulos añejos.

Uno seguirá con su malaria, pero con la revancha inmediata que le dará la Liguilla, mientras que el ganador hará una descompresión muy fuerte de su entorno y buscará el doblete en la finales de Liga. El hecho es que la malaria a uno se le diluirá un poco, porque bien sabemos que los equipos se constituyen para ser campeones de Liga, pero ¿a quién le dan pan que llore? Y la Copa es un buen trozo de trigo.

 

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