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Opinión

Christian Martinoli

Uno de los mejores cronistas deportivos en México, trabaja para TV Azteca y ha colaborado con RÉCORD desde 2010.

NL Rules

2017-12-07 | Christian Martinoli
CHRISTIAN MARTINOLI
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Sólo en algunos lugares de Sudamérica existe equiparación con la desenfrenada pasión que genera el futbol en Nuevo León. Y es que cuando se trata de un balón rodando por tierras norteñas, los corazones arden como en ningún otro lado del país. No estamos hablando de trascendencia ni de alcance nacional ni de grandeza o pequeñez, sino de mero arrebato, de delirio sin fin, de frenesí puro.

El sentido de pertenencia del regiomontano es extremo, sus tradiciones y costumbres regias las encumbran por donde pasan y una de tantas es su afición recalcitrante por el futbol y las dos veredas que transitan. 

Folclore presumido hace años por los campos del futbol mexicano que desde hace un tiempo a la fecha es bien correspondido por sus equipos y las despampanantes inversiones colocadas en las nóminas deportivas. 

La bonanza del juego regio está bien protegida en estas dos instituciones que con todo honor han marcado tendencia y con justicia se presentan como las mejores escuadras de la nación. Mucho se podrá decir sobre la extrema cantidad de foráneos y del desmedido gasto que las dirigencias desembolsan año tras año con el objetivo de trascender; sin embargo, nadie podrá criticar algo que está dentro de las reglas del juego, ya que ni Tigres ni Rayados incumplen estatutos de la Federación. Ese debate se deberá colocar en otra ventanilla.

Cierto es que el desenfreno de algunos radicales de la tribuna ha dejado penosas imágenes que jamás deberán repetirse en un campo del futbol mexicano, por ello todos nos unimos a pedir que más allá del resultado deportivo, no dejemos de ver esto como un juego y entretenimiento. Esto no es la guerra, es futbol y si la pelota a veces, por caprichos de la misma, es esquiva, nunca podrá validar ni justificar un acto vandálico, desorden público o violencia.

Tigres y Monterrey, sin duda, tienen su lugar en la cancha bien ganado y la fidelidad de sus aficionados impacta a cualquiera. Son para muchos las mejores del país, es momento de demostrarlo tanto en la victoria o la derrota con gallardía, respeto y educación. Al final esto es un juego y qué bueno que en Nuevo León hoy tienen la Final que todos soñaron. Disfrútenla, que de eso se trata. Sólo de eso.

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