opinion.david-faitelson.chivas-cual-es-tu-realidad
Opinión

David Faitelson

David Faitelson es dueño de un estilo duro, pero frontal al momento de dar opiniones, que incluso le han traído choques con algunas figuras.

Chivas: ¿Cuál es tu realidad?

2018-04-27 | David Faitelson
DAVID FAITELSON
Comparte en:
Contenido Patrocinado

¿La de los baños eufóricos en La Minerva o la de un equipo que ha arrastrado la mediocridad en los últimos dos torneos de Liga? Chivas… ¿Cuál es tu realidad?

Entre la felicidad y la celebración debe reinar la elocuencia. Chivas amaneció como Campeón de la Concacaf, pero sigue siendo el penúltimo en la tabla general y volverá a ver, por segundo torneo consecutivo, una Liguilla por televisión.

¿Cuál es la realidad de Chivas? ¿La felicidad que debe provocar la obtención de un trofeo internacional con un preciado boleto al Mundial de Clubes o la irrefutable posición de decimoséptimo en la tabla, penúltimo en la general, apenas sólo mejor, por unos puntos, que el descendido Lobos BUAP? Hace algunos días, cuando intentaba defender la postura de que un llamado 'equipo grande' debe levantar trofeos a como dé lugar, alguien me increpó con un dato revelador: si el torneo mexicano se jugara en el sistema de temporadas largas como en Europa, con tres descensos, Chivas habría perdido la categoría.

Pero… ¿Cuál es la realidad de Chivas?

Nos la pasamos, casi todo el campeonato, afirmando que sus números no eran el reflejo verdadero de lo que hacía e intentaba en el campo de juego. Ha ganado, sin embargo, sólo 3 juegos de 16 disputados, con una escandalosa cifra de 22 goles. Por otro lado, ha tenido un afortunado paso por el torneo de la Concacaf, cuyo nivel siempre ha sido colocado en entredicho. Es verdad que le tuvo que ganar a un equipo dominicano -el Cibao- que no significó ninguna oposición, pero después eliminó a dos clubes regulares de la MLS -el Seattle Sounders y el Nueva York Red Bulls- antes de lograr su máxima exhibición del año: la victoria de 2-1 en territorio canadiense sobre el Toronto, el campeón de la MLS que había dejado en el camino a Tigres y al América. Ganar la Concacaf estaba dentro de los planes primarios del Guadalajara, pero el torneo de Liga siempre tiene un aliciente especial para los equipos mexicanos. Existe una poderosa cultura doméstica por el futbol en México que es difícil de combatir.

Y no se trata de ganar uno u otro como algunos defensores del Guadalajara comenzaban a afirmar apenas habían terminado las rondas de penaltis del miércoles. Chivas no hizo de lado la Liga para ganar la Concacaf. Hace tiempo que sus bonos en la Liga habían caído dramáticamente. Yo estaría de acuerdo, sin embargo, que un equipo como el Guadalajara de pronto optara por concentrarse en un evento internacional, pero lo que no debe existir -no puede permitirse un club de la dimensión de Chivas- es un desequilibrio en el que renuncie de manera contundente y penosas a competir por uno u otro evento, como ha sucedido con el campeonato doméstico en las últimas dos temporadas.

La contradicción de la noche del miércoles radica en bañarse en La Minerva comprendiendo que el torneo local ha sido un completo desastre. Pero Chivas lo tiene que hacer. Los equipos grandes fueron hechos para coleccionar trofeos, aun en épocas buenas, malas, inciertas o contradictorias como esta. Chivas debe festejar, colocar el trofeo en sus vitrinas y ver para adelante. Y adelante tiene la misión de volver a una Liguilla y de presentar un cuadro sano y solvente que sea capaz de lograr un Mundial de Clubes competitivo.

Chivas vive en “dos mundos” opuestos, contradictorios: ¿A cuál pertenece? Esa es la pregunta.

Contenido Patrocinado