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Opinión

David Faitelson

David Faitelson es dueño de un estilo duro, pero frontal al momento de dar opiniones, que incluso le han traído choques con algunas figuras.

Cruz Azul y América: sólo ellos

2018-11-27 | David Faitelson
DAVID FAITELSON
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El domingo 26 de mayo del año 2013 debió haber dejado secuelas profundas e imborrables en la historia moderna de ambos clubes. Nada podría ser igual después de una noche tan dulce y tan gloriosa para uno, como amarga y sombría para el otro. América y Cruz Azul habían redescubierto el valor de ganar o perder, las grandes repercusiones de hacerse daño entre ellos mismos y la auténtica rivalidad, el antagonismo puro y real que sus ancestros habían dejado en evidencia 30 años antes como gran parte de la historia pasional del futbol mexicano.

Cruz Azul y América han apartado una nueva fecha: la del domingo 16 de diciembre. Los dos populares equipos de la capital llegan como grandes favoritos para reeditar la Final que jugaron hace cinco años y de la cual salieron juegos pirotécnicos. ¿Qué lo puede evitar? ¿Quién lo puede evitar? ¿Ellos mismos o quizá alguien más…?

Descubrir quién es mejor es una tarea por demás complicada. Las credenciales de ambos están puestas sobre la mesa: Cruz Azul es la mejor defensiva del campeonato, el equipo más regular, el líder general, el campeón de la Copa, un cuadro serio y competitivo que parece más decidido y sólido que nunca para romper el largo ayuno de campeonatos que pesa sobre la institución.

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El América llega a la Liguilla con 11 fechas sin derrota, con el equipo más goleador (33 tantos) y el cuadro con el mejor equilibrio. Sólo tres puntos de diferencia entre ambos. Cruz Azul ganó 11 partidos de 17 fechas, pero el América sólo perdió 2 juegos en todo el torneo. Ni siquiera el enfrentamiento directo entre ambos arroja alguna pista: fue un 0-0 que empezó bien y terminó mal a finales de octubre sobre el maltratado pasto del Estadio Azteca. ¿Cuál de los dos es mejor? Quién sabe. Los números no arrojan un horizonte claro.

Pero deberíamos cambiar la pregunta: ¿Quién puede realmente 'estropear' una Final soñada entre azules y amarillos? Entendemos que las Liguillas están siempre llenas de circunstancias y condiciones extrañas, que en una Liguilla se gana más con las pulsaciones que con el futbol –así lo hizo el América precisamente en aquella noche lluviosa del 2013– y que en juegos 'de matar o morir', la experiencia de los futbolistas, del entrenador, de la camiseta y hasta del aficionado puede terminar definiendo el rumbo.

¿Quién puede 'arruinar' la Final soñada? 
La lista, para mí, la encabeza el Campeón, Santos, un equipo extraño, otra vez, que sin la necesidad de demasiados reflectores y con un cambio de entrenador en el camino –la intempestiva salida de Robert Dante Siboldi– ha logrado mantener el rumbo y afianzarse. Apostar contra el Santos de Furch, de Jonathan Rodríguez, de Brian Lozano, del 'Gallito' Vázquez, de Angulo, Artega y Jonathan Orozco, sería un terrible error.

Y luego y casi siempre está Tigres. La experiencia de Ricardo Ferretti en Liguilla no la tiene nadie. El paso goleador de Gignac en esta fase del torneo –nuevamente campeón anotador– y un equipo que ha jugado mucho tiempo junto y al que le sobra calidad individual en cada una de sus líneas. Tigres ha arribado en buena forma a la definición por el título y el hecho de que no se le catalogue como un amplio favorito, puede terminar jugando a su favor.

El resto de la lista –Pumas, Rayados, Toluca y Querétaro– no deja de ser peligroso, pero no parece tener la suficiente fortaleza para descomponer el 'sueño capitalino'.

Al final, creo que sólo Cruz Azul y América pueden evitar la soñada Final. Sólo ellos mismos pueden 'traicionarse' antes de lograr el cometido. El balón está en sus pies…

Cruz Azul y América son y se saben favoritos. La Liguilla los pondrá a prueba. Aquel que domine mejor sus emociones, sus presiones y hasta sus 'fantasmas', tendrá más posibilidades de llegar. Por ahora, tienen apartada una fecha, porque el dolor y el éxtasis de aquel 26 de mayo de 2013 no se olvida.

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