Más ‘mole’...

Tengo una buena y una mala para la Selección Mexicana. La buena: los juegos “moleros” en Fecha FIFA están en peligro de extinción. La mala: Ahora se jugará en Fecha FIFA un torneo “molero” de carácter oficial. 

Puedo imaginarme el escenario: es un martes de Fecha FIFA. México jugará ante Jamaica -para que nadie se ofenda y si se ofenden que al menos tarden en entendernos-.

El juego es en Kingston y la FMF le pide al ‘Chicharito’, a Andrés Guardado y a Guillermo Ochoa que hagan un largo viaje para afrontar el “decisivo” juego de la Liga de las Naciones de la Concacaf.

En lugar de “huir” competitivamente de su área geográfica futbolística, México está “atándose” a ella de manera irremediable. A nivel de clubes, ya dejó la Copa Sudamericana y la Libertadores. A nivel de selecciones, ha sido condicionado en las últimas versiones de la Copa América. El futbol mexicano va en dirección contraria a lo que durante algún momento se significó como una oportunidad histórica y maravillosa de fogueo y de crecimiento.

Entiendo también que la Copa de las Naciones de la Concacaf es una consecuencia de la misma Copa de las Naciones que se ha lanzado en Europa. Es decir, utilizar las pocas Fechas FIFA disponibles para que las selecciones jueguen su propio torneo regional. Para los europeos, por ejemplo, alcanza con el nivel que logran entre ellos mismos, pero para México, era, hasta cierto punto, una ocasión para encontrar rivales de calidad que se distorsionó por completo con el contrato de la FMF con SUM y los llamados partidos “moleros” en Fechas FIFA. Hoy, en lugar de “juegos moleros” tendremos un “torneo molero”, donde México tendrá el placer de enfrentar a sus conocidos contendientes de un área que muchas veces parece dar un paso hacia el frente y dos hacia atrás en cuanto a su crecimiento y fortalecimiento futbolístico.

Para lo único que debe servirle a México la Concacaf es para clasificarse al Mundial, pero la nueva Copa de las Naciones le asegurará más mediocridad en su intento por crecer. Uno esperaría que México jugara en Fecha FIFA ante rivales que le significarán un aprendizaje y un crecimiento en todos los sentidos del juego.

Entiendo el compromiso comercial que México tiene en esta renovada Concacaf, pero lamento que no haya sido la “cabecilla” de un movimiento por acercar más al área hacia los niveles futbolísticos del sur del continente. Yo hubiese visto de forma maravillosa una gran Liga de las Naciones con Concacaf y Conmebol unida. Esa sí que habría sido interesante ante el mensaje europeo de que “nosotros competimos contra nosotros mismos”. México no empujo por unir a toda América. Parece que se conformó con quedarse en la mediocridad y pobreza de su zona. “Aquí nos tocó vivir y punto”.

Volver a la Copa Libertadores, afianzarse como participante de la Copa América y tratar de lograr otro torneo como aquella Copa América del Centenario deben ser objetivos a corto plazo de la Federación Mexicana de Futbol. Los “juegos moleros” pudieron haber pasado a mejor vida. Un “torneo molero” está a la vista.