opinion.david-faitelson.paciencia-tata
Opinión

David Faitelson

David Faitelson es dueño de un estilo duro, pero frontal al momento de dar opiniones, que incluso le han traído choques con algunas figuras.

Paciencia, 'Tata'

2019-01-08 | David Faitelson
DAVID FAITELSON
Comparte en:
Contenido Patrocinado

Lo primero que necesita un futbol impaciente es paciencia. el 'Tata' la necesitará. Ser entrenador de la Selección Mexicana no es de por sí una tarea sencilla.

Ser un extranjero y entrenador de la Selección Mexicana promete dificultar todavía más la tarea.

Contra lo primero que tendrá que "luchar" el nuevo entrenador de la Selección Mexicana de futbol es algo que no puede resolver: su posición de extranjero en un futbol que generalmente enarbola una bandera nacionalista, con defensores a ultranza de la hipótesis que el director técnico de un equipo que representa al futbol de México debe ser mexicano.

Gerardo 'Tata' Martino sabe que eso no lo puede remediar, pero también entiende que todos los entrenadores del mundo y todos los procesos de selecciones y de equipos de futbol viven, se fortalecen, se debilitan y mueren a partir de los resultados. Por ese mismo –llamémosle ‘’desgaste’’– pasaron algunos otros nombres de directores técnicos extranjeros en la Selección Mexicana –Menotti, Eriksson y, más recientemente, Juan Carlos Osorio– y hasta otros más que aunque extranjeros forjaron su trayectoria y su vida en México –Bora Milutinovic y Ricardo Antonio Lavolpe–.

Respeto el punto de vista radical de algunos –Hugo Sánchez es el primero en la fila–, pero no entiendo el futbol por nacionalidades. El futbol es futbol. Se trata de una mezcla de conocimiento, de experiencia y de personalidad. Aquel que reúna esas características, sea mexicano, chino, ruso, japonés o argentino, está en condiciones de dirigir un equipo.

Lo primero que habría que recordarle a los 'detractores' de Martino es que si conocen un entrenador mexicano que en su currículum presuma el haber dirigido a la selección de Argentina y al Barcelona que lo presenten inmediatamente. Entiendo que los resultados del 'Tata' en ambas experiencias no fueron totalmente satisfactorios, pero insisto en que son pocos los entrenadores que en este complejo mundo del futbol pueden ser parte de esa élite. Martino lo fue. Sus números en la mayor parte de los países donde trabajó fueron positivos. En Argentina, en Paraguay y hasta en Estados Unidos siempre hubo algo rescatable. Ello, sin duda, lo ha traído hoy a México.

Los opositores destacan que no tiene un conocimiento pleno del futbol y del futbolista mexicano. Yo creo que en el mundo en que vivimos hoy, donde la comunicación fluye y las distancias se reducen, hay pocas cosas qué esconder. Martino es, antes que cualquier otra cosa, un hombre inteligente. Sabrá escuchar, aprender y comprender por dónde puede obtener los mejores resultados del jugador mexicano. Como todos los entrenadores, dependerá de la materia prima, del futbolista. Entenderá, pronto, las ventajas y también las desventajas que tiene un entrenador en México. En la medida en que pueda captar y aprovechar mejor el talento –el poco o mucho existente en este futbol– estará más cerca de lograr el éxito.

Creo que Martino no se cerrará a nada ni a nadie. Ni a la ‘’vieja guardia’’ que parece vivir en las horas finales de su aporte a la selección –Guardado, Layún, 'Chicharito', Ochoa, Moreno– ni a una generación que viene despuntando –'Chucky' Lozano, 'Tecatito' Corona, Héctor Herrera, Carlos Salcedo, Raúl Jiménez–, ni tampoco a otra que apenas ha comenzado el camino –Diego Lainez, Víctor Guzmán, Erick Gutiérrez–. Aunque parece claro que está obligado a empujar un cambio generacional, todo es válido dentro de un proceso. Los jugadores más veteranos pueden terminar ayudando a los más jóvenes. La experiencia puede ser fundamental al momento de buscar un resultado que establezca el camino para el objetivo final.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR: EUROPA NO PUEDE ESPERAR...

Y hablando de objetivos, yo creo que los de la era Martino no cambian demasiado con respecto a los de sus antecesores en los últimos 30 años. Llevar a México al siguiente nivel de calidad futbolística. No lo encontrará en la eliminatoria mundialista, tampoco en la Copa Oro y en casi nada que tenga que ver con esta área futbolística. A Martino se le medirá y juzgará a partir de lo que México logre en el Mundial de Qatar 2022. Claro, para llegar fortalecido hasta ese sitio tendrá que gozar de una credibilidad que sólo dan los resultados y que en el caso de la Selección Mexicana se cuentan desde partidos amistosos, torneos de Concacaf y obviamente la eliminatoria para ganar el boleto mundialista. Todo cuenta en una selección que siempre está bajo el escrutinio del aficionado, de la crítica y obviamente de los 'dueños' del gran negocio que significa esta industria.

Hay un tema más que se transformará en uno de los retos del 'Tata': encontrar un estilo para la Selección Mexicana. Hay una confusión casi eterna sobre si la forma de jugar al futbol depende de las condiciones del entrenador o de los futbolistas con los que cuenta. En el caso de Martino, nos queda claro que proviene de una escuela vanguardista –bajo muchos ideales de Marcelo Bielsa– en el que el resultado es una consecuencia de tratar de jugar bien al futbol. Las críticas sobre Osorio, las rotaciones, los experimentos se quedaron en la era anterior. Martino debe aplicar, primero, lo que él conoce y cree en la cancha y luego adaptarse a las características e idiosincracia del futbolista mexicano. El futbol mexicano no tiene un estilo propio. Sus resultados a nivel internacional han sido tan 'vagos' y escasos que no han encontrado una trascendencia en la cancha y en las formas del juego.

Gerardo Martino es el nuevo entrenador de la Selección Mexicana. Bienvenido, 'Tata', suerte, fuerza y paciencia, mucha paciencia porque la va a necesitar.

Contenido Patrocinado