opinion.david-faitelson.rey-de-la-concacaf-plebeyo-del-mundo
Opinión

David Faitelson

David Faitelson es dueño de un estilo duro, pero frontal al momento de dar opiniones, que incluso le han traído choques con algunas figuras.

‘Rey’ de la Concacaf... ‘plebeyo’ del mundo

2017-10-10 | David Faitelson
DAVID FAITELSON
Comparte en:
Contenido Patrocinado

*Con el nivel de futbol que ha mostrado hasta ahora, México no aspira ni siquiera al cuarto juego del Mundial.

*Hay algunos que esperan pacientemente un milagro inesperado y que México se transforme en protagonista el próximo verano; que esperen sentados.

*Impacta la nula autocrítica del entrenador, de los futbolistas y de algunos críticos (la mayor parte de ellos inmiscuidos en el negocio que significa la Selección).

Las estadísticas vuelven a ser irrefutables, magistrales, espectaculares y cualquier otro epíteto que se les ocurra, pero si se trata de futbol, México no ofrece confianza alguna de que una vez que llegue la Copa Mundial será capaz de mostrar un estilo y una condición competitiva de juego.

Olvídense del quinto partido. Con el futbol que hemos visto de la Selección hasta ahora, llegar al cuarto juego, sortear la Fase de Grupos con eficiencia en Rusia, promete ser toda una odisea.

Pero hay quienes creen que los ‘milagros’ existen en el futbol (ayer mismo presenciábamos el llamado de Islandia que se clasificó de forma extraordinaria a su primer Mundial) y suponen que ya en Rusia, la Selección Mexicana será otra y que su juego le alcanzará para llegar, al menos, al mismo nivel que ha mostrado en los últimos campeonatos mundiales. Nadie habla del famoso ‘quinto partido’, pero sí de gestionar con protagonismo en la Fase de Grupos y afrontar los Octavos de Final con la gallardía competitiva de Nueva York 1994 (Bulgaria), Montpellier 1998 (Alemania), me brinco Corea-Japón 2002 con la vergüenza ante Estados Unidos, para continuar con Leipzig 2006 (Argentina), Johannesburgo 2010 (Argentina) y Fortaleza 2014 (Holanda).

Ese es el límite del futbol mexicano y algunos creen que con eso podemos conformarnos. La realidad es que con el nivel de juego que ha tenido México en esta eliminatoria (más la Copa América, la Copa Confederaciones y la última Copa Oro), ni siquiera debería alcanzarles para lograr tal escala del Mundial. Jugando como lo ha hecho en la Concacaf, con todos y sus mágicos números, México no sería capaz de sortear un grupo que desde el ‘Bombo 2’ del sorteo moscovita le significará enfrentar a una potencia mundial y a un par de selecciones competitivas de Sudamérica, Asia o África.

El mayor problema hoy, cuando queda poco tiempo para el Mundial, es que hay poca autocrítica en el medio. Desde el entrenador, pasando por los futbolistas y siguiendo con gran parte del periodismo. La mayor parte de ellos se envuelve en los números de la Concacaf, en la facilidad con la que México afrontó el proceso y se ganó el boleto para Rusia. Algunos de ellos, insisto, esperan un ‘milagro’.

Juan Carlos Osorio debe tener gran parte de la responsabilidad. No le ha dado a México un estilo ni una condición apropiada para jugar con la competitividad y la regularidad debida. Los futbolistas son también los responsables. Algunos de ellos, la mayoría, no muestra el nivel y muchas veces tampoco la actitud necesaria al momento de enfundarse en la camiseta que representa al futbol de un país. Y los medios que se mezclan con los negocios se dedican a aplaudir y a ‘jugar’ de porristas de esta Selección.

La realidad es inobjetable (más allá, recalco y vuelvo a recalcar de la pulcra eliminatoria mundialista), está el futbol que México ha demostrado, el nivel de sus futbolistas, la terquedad de su entrenador (de seguir improvisando, probando futbolistas fuera de posición y rotando alineaciones) y la certeza de que los dirigentes sólo están preocupados por el negocio que signifique la Selección. Para ellos, llegar al Mundial, alejar cualquier riesgo como el que se vivió en el 2013, es suficiente y satisfactorio.

México termina su eliminatoria como ‘Rey’ de la Concacaf, pero me pregunto: ¿Es ‘plebeyo’ en el mundo futbolístico? Con lo que ha mostrado hasta ahora en la cancha, creo que no es garantía de nada, ni siquiera de llegar ya no al quinto, sino al cuarto partido del Mundial.

Contenido Patrocinado