Chucky no se fue con los espejitos europeos

En cuanto acabó la práctica en Kazán, aún en el campo, el ‘Chucky’ Lozano terminó de escuchar al Profe Osorio: le aconsejó no revelar aún su futuro a la prensa, centrarse en brillar en Confederaciones. Hirving recién le había contado que el trato con PSV está hecho, y para que se haga oficial falta que pase los exámenes médicos y estampe su rúbrica para jugar en la Eredivisie la siguiente campaña.

Tanteó antes el terreno

Les cuento primero que en cuanto acabó la temporada pasada para Pachuca, Hirving viajó de vacaciones con su familia, mujer, hijos y abuelos, a Holanda. En su momento me lo contó un buen amigo en común: “Te digo que se va al PSV”. Ya era una de las opciones que buscaban al juvenil mexicano. Pensé ‘podría ser’, pero eso de que ir de vacaciones a la tierra de los tulipanes signifique que esté cerca de llegar al club holandés, pues no es para asegurarlo. Claro que ayer me habló mi compadre nomás para soltarme el inevitable: “Te lo dije y no lo publicaste”. Qué les digo.

Pues sí, resulta que el Chucky, a pesar de que me aseguran que se le subió feo, que anda mareado con la fama, salió bueno de la cabeza para planear su futuro. Me explican que Lozano viajó en esos días para ver lo que tenía Eindhoven para ofrecer a su familia, y, por supuesto, para conocer de primera mano lo que significa el club; además, habló con Guardado y Moreno, para cerciorarse de que sería la mejor opción para su futuro.

Salió bueno para el negocio

Además, también les cuento que en su momento, Hirving supo asesorarse de un personaje también bueno para el ‘bisne’ futbolero como Chucho Martínez. Cuando negoció su más reciente contrato con Pachuca, el que lo amarró al club con miras a una posible gran venta, Lozano logró un considerable aumento en el sueldo, pero contrario a lo que sucede con muchos jugadores, que ya se están gastando la lana antes de recibirla, el jugador pidió ayuda al jerarca tuzo en su futuro financiero: le solicitó que una parte de su aumento no se lo depositara, sino que le ayudara a invertirlo.

El Chucky no sólo ganó una buena opción económica, sino el reconocimiento del mandamás de Grupo Pachuca, que le ha ayudado desde entonces a tratar de elegir la mejor opción para su familia.