Tras discusión no lo dejan ni despedirse

Ya saben que no podía quedarme sin actualizarlos sobre la novela de la salida de Ricardo Peláez del América. Así que voy directo al grano.

Resulta que tras discutir con De Luisa ayer (viernes) en la mañana en Coapa, lo que aceleró su partida del club, Peláez salió de la oficina y se dirigió a la cancha de entrenamiento. Pues resulta que un encargado de seguridad ya no lo dejó pasar, ¡como lo leen!, no permitió que se acercara a los futbolistas en la práctica. Ante la sorpresa, a Ricardo no le quedó de otra que llamar su atención: “¡Adiós, muchachos!”, gritaba alzando la mano, “éxito, ¡vayan por el título!”, mientras los jugadores volteaban sin entender qué pasaba.

La oreja que me lo cuenta, que estaba en el campo, me explica que algunos decían “qué poca abuela, no son formas”, y el mal trato al exdirectivo molestó hasta a La Volpe. De quinta. Seguro estoy que cuando don Emilio se entere, le reclamará a varios. Ya les aviso.