Los olvidados del América

En los registros oficiales de la Liga MX aparecen en el plantel del América solamente cuatro futbolistas hechos en Coapa, en esas fuerzas básicas que lograron no hace tanto tiempo, éxitos y más éxitos. Erik Pimentel, Gil Burón, Carlos Rosel y Edson Álvarez son los únicos que están en la lista de un plantel lleno de jugadores procedentes de otros equipos.

Es cierto que Romano y Peláez encontraron la fórmula para volver a ser Campeones de Liga y que han logrado títulos, además de trascendencia a nivel internacional, pero hay un descuido en las fuerzas básicas de un equipo que de por sí no se caracteriza por ello y ahora muestra una tremenda pobreza en este renglón.

De lo construido por Alfredo Tena y Guillermo Huerta (con quienes este club fue tetracampeón de la Sub 20), quedan cenizas. En junio de 2014, Mario Hernández Lash llegó como director de fuerzas básicas del América y a partir de ese momento sólo se ha visto retroceso en el trabajo con los jóvenes.

Ángel ‘Coca’ González regresó como visor para el América en espera de que lleve a algunos futbolistas que puedan trabajar para volver a darle vida a un esquema estancado. Es decir, la parte deportiva del club intenta rescatar lo que ha venido en picada.

Según versiones internas, ‘Coca’ González no es del grupo de Hernández Lash y que solamente es un visor, quien lleva a los jugadores o los convence de que vayan a esta institución, lo que puede generar mayor división de la que hoy parece hay. Es una lástima porque un equipo como el América, aunque no depende de sus básicas, es uno de los más buscados por los prospectos a jugadores y no saben aprovechar esta situación. 

Es tanta la escasez que tienen en el plantel al joven Manuel Pérez, un jugador formado en las cantera de los Pumas, que después de pasar por Pachuca, cayó con la escuadra americanista y los muchachos que regresaron de los equipos de ascenso a los que fueron prestados, no se ve que tengan proyección. 

Ni en Sub 20, ni en Sub 17 y ya no se diga en Segunda División -ahora que esta institución no cuenta con una filial de ascenso- se percibe que haya un trabajo ordenado y que pueda reflejarse en el primer equipo.

Han mandado a sus mejores elementos a otros lugares a ‘foguearse’ para después regresarlos y relegarlos a la banca. Así le pasó a Erik Pimentel (fue a Atlante), a Alejandro Díaz (ahora en Necaxa), a Bryan Colula (regresó de Venados).

Pero todos ellos parecen estar muy lejos de los tiempos que vivieron hombres como George Corral, Diego Reyes, Raúl Jiménez o Hugo González. La historia del Tetracampeonato de la Sub 20 americanista se forjó cuando el primer equipo era una basura y no ganaba nada.

El primero de estos títulos fue en el 2010 y de ahí se levantaron con una hegemonía tal que sus futbolistas más destacados llegaron al primer equipo para jugar y no solamente para calentar la banca. Luego, incluso, los vendieron al extranjero como son los casos de Reyes y Jiménez. Otros, claro, desaparecieron de los sitios importantes como Luigiani Gallardo, pero eso ocurre en todos los equipos y con un gran número de futbolistas. Algunos otros de esos futbolistas ya ni siquiera juegan y se dedican a otra cosa. 

Aquel Tetracampeonato quedó solamente en una anécdota de la que surgieron jugadores que ya no están más en la institución y que así como se ven las cosas, no se repetirán a menos de que en verdad le pongan seriedad al trabajo con sus inferiores y cumplan con el discurso demagógico con el que tratan de desviar la atención de un problema que si hubieran previsto, hoy que no tienen dinero para comprar refuerzos, pudiera sacarlos de apuros.