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Opinión

El Chelsea naufraga

2015-10-07 | Santi Nolla
SANTI NOLLA
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Pedro se fue del Barça al Chelsea buscando titularidad y minutos con Mourinho. En el último partido disputado en Stamford Bridge, el equipo de Roman Abramovich perdió 1-3 ante el Southampton, entrenado por Ronald Koeman y Pedro no salió hasta el minuto 64, sustituyendo a Willian. Ni titular ni minutos. En el Barça, con la lesión de Messi, hubiera entrado seguro en la alineación de salida.

Nadie puede predecir las lesiones, pero es evidente que en una temporada siempre hay momentos para jugar. Cada vez se disputan más partidos en el futbol de élite y los buenos jugadores, si están en los grandes clubes, tienen siempre oportunidades. Pedro era el cuarto delantero en el Barça, lo que significaba que era el que entraba primero si no estaban Messi, Neymar o Suárez, quienes no podían jugar todos los minutos de la temporada. Tras la suplencia del otro día es posible que empiece a arrepentirse de haberse ido. Quedarse hubiera sido bueno para los dos, para Pedro y para el FC Barcelona.

Mejor
Sin ninguna duda, el Barça se encuentra mucho mejor que el Chelsea en este inicio de campeonato. Cuando el presidente debe salir a ratificar al entrenador, malo. Mourinho cuenta con grandes jugadores, pero su equipo necesita equilibrio. El entrenador portugués confió en Diego Costa para acompañar al impresionante Hazard en la punta, pero no le ha salido bien en este inicio de temporada. En la pasada, sin embargo, ganó la Liga y Mou cree que están pagando todavía aquel triunfo.

Del Atlético de Madrid se llevó a Costa y repescó a Courtois, quien está lesionado (Filipe Luis ha vuelto al Atlético) y del Barça se llevó a Cesc y ahora a Pedro. Al final, fichó futbolistas de sus dos grandes rivales cuando era entrenador del Madrid. Al final, los técnicos acaban fichando lo que ven. No se pueden pasar horas viendo videos de partidos y sólo pueden observar jugadores si se enfrentan a ellos. No tienen tiempo para más en los actuales grandes clubes, cada vez más exigentes. Pero en este arranque, el  Chelsea da la sensación de que es menos Mourinho de lo esperado. Ha rebajado un tanto la intensidad y la presión. Esas eran dos de las características básicas de los equipos del técnico portugués, que ya en pretemporada se quejó de que había otros equipos que estaban fichando a muchos jugadores y acabarían devaluando la Liga.

Ovación
El City se está imponiendo a un Chelsea en pleno naufragio, sin que ninguno de los equipos de la Premier esté jugando con la regularidad debida. Los de Manchester, ambos, son capaces de lo mejor y de lo peor. Agüero estuvo impresionante este fin de semana en el que ‘pentagoleó’, pero el City no hace mucho fue derrotado por un lacerante 4-1 por el Tottenham. El United de Van Gaal fue goleado (3-0) por el Arsenal de un gran Alexis. El chileno marcó dos goles y fue despedido con una grandísima ovación cuando fue sustituido en el minuto 81.

Pedro y Alexis eligieron caminos parecidos, pero con resultados diferentes. Alexis es la estrella del Arsenal, un jugador codiciado y que da espectáculo. Wenger confía en él. En el Chelsea, Pedro llegó como salvador y este fin de semana, Mourinho ya prescindió de él. El portugués realiza muchas veces esas actuaciones para acabar de motivar a sus jugadores. Es posible que más tarde se pueda ver la mejor versión de Pedro, pero por la alineación del pasado sábado no parece ser un intocable para Mourinho.

Fortuna
En el Barça, tanto Munir como Sandro están teniendo muchos minutos. Luis Enrique va alternando la titularidad de los dos y va confiando en ellos, metiéndoles en el más grande escaparate. Sin Messi han tenido la oportunidad de poder demostrar que sirven para el primer equipo o que pueden servir en un corto plazo.

En el encuentro frente al Sevilla, ninguno de los dos estuvo peor que Luis Suárez, el uruguayo que está siendo decisivo en este inicio de campeonato, pero que no tuvo su día afortunado en Sevilla. Tampoco lo tuvo todo el equipo que mereció un mejor resultado que esa derrota injusta, pero a veces, el futbol no entiende de méritos, sino de goles y los sevillanos fueron capaces de marcar uno más que el Barça, aunque tuvieran muchas menos ocasiones para hacerlo. Neymar sí estuvo a la altura, aunque él solo no pudo darle toda la vuelta al marcador, aunque lo intentara.

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