López Zarza, Subcampeón del Mundo en 1977
OMAR HERNÁNDEZ
La mejor participación de una Selección Mexicana juvenil se dio en el Mundial disputado en Túnez 1977 (no avalado por la FIFA), donde Enrique López Zarza fue uno de los juveniles que lograron el subcampeonato del certamen.
El ahora director técnico de Pumas Morelos destaca las virtudes de aquella selección finalista, donde las más importantes eran la unión del grupo y la ausencia de figuras en lo individual.
"La conformación como grupo es básica. A pesar de ser una Selección, están en un proceso; muchos integrantes ya han participado en Primera División, y pudiera pensarse que son los jugadores de talento, se puede distorsionar si son más o son menos.
"En Túnez nos vimos todos como iguales, nadie se creía superior, teníamos dinámicas internas para ayudarnos y se manifestó en la cancha. Del grupo fortalecimos las individualidades”, subraya el subcampeón juvenil mientras recuerda el momento.
La aventura del primer Mundial
Con Ignacio Trelles al frente de Selecciones Nacionales, y Alfonso Portugal como director técnico, Enrique López Zarza recuerda que, para esa justa que fue Sub 19, no estaba considerado en primera instancia, "pero Hugo Sánchez no pudo participar con esta Selección, puesto que ya estaba integrado al primer equipo de Pumas, y me mandaron a probarme. Terminé integrando a esta Selección”.
El oportunismo del joven de los Pumas no paró ahí. Por azares del destino, el lateral izquierdo titular, José Flores, tuvo una fractura en la mano durante el primer tiempo del duelo inaugural del Tricolor juvenil ante Túnez, donde México goleó 6-0, y López Zarza se adueñó de la posición para el resto del certamen.
"Con Túnez generamos mucha confianza, se le ganó 6-0 y eso nos dio tranquilidad para enfrentar los demás partidos”, asegura López Zarza, quien recuerda que junto a jugadores con la experiencia que habían conseguido algunos, como "Memo Cosío, Eduardo Rergis, Carlos García, quienes venían desempacados de la Selección olímpica”, empató los siguientes duelos contra España y Francia, para enfrentar a Brasil en una de las Semifinales.
"Fue de las selecciones que más trabajo me costó marcar al extremo, que era Junior, me hizo ver mi suerte, pero como equipo sacamos el resultado que nos llevó hasta la Final”.
Ya en el duelo definitivo, el Tricolor juvenil volvió a empatar con el representativo de la URSS y terminó cayendo en penaltis.
"No supimos manejar la ventaja en el marcador, y en los penaltis fue una desgracia que fallara Fernando Garduño, que definió el título. En ronda de muerte súbita me tocó ejecutar un penalti y lo acerté”, compartió.