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Andrade ‘Cien’ Almas sueña con dominar la WWE

Andrade ‘Cien’ Almas sonríe para la cámara con su cinturón de NXT
Andrade ‘Cien’ Almas sonríe para la cámara con su cinturón de NXT | ERNESTO PÉREZ
El Campeón de NXT aseguró que desea ser una leyenda en la lucha libre estadounidense
2018-03-19 | CARLOS ZULBARÁN
nmlopez
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La lucha libre mexicana sigue ocupando lugares estelares en planos internacionales con estrellas como Andrade ‘Cien’ Almas, actual Campeón de NXT, quien es el primer luchador latino en conquistar dicho cetro de WWE y además tiene aspiraciones de dejar un legado inquebrantable en Estados Unidos.

El ídolo de Gómez Palacio, Durango, compartió a RÉCORD sus próximos planes, los cuales se sitúan en la ‘Vitrina de Inmortales’, magno evento de la compañía en el que los hombres se convierten en leyendas.

“Vine por algo y voy por más. El título de NXT era el objetivo y ahora quiero mucho más y lo voy a obtener; quiero marcar la diferencia. Soy una persona con sueños y con una mentalidad ganadora, y me preparo para eso, por ello quiero ir a WrestleMania y encabezarla como estelar.

“Para cuando llegue esa gran noche quiero a Triple H, Brock Lesnar, John Cena, encontrarme de nuevo con Shinsuke Nakamura. Tengo sueños y voy a conquistarlos. Hay mucho talento en WWE y voy por los mejores en las marcas principales, es difícil, pero no imposible”, comentó decidido ‘Cien’ Almas.

Andrade posando con su título de NXT

El otrora 'La Sombra' aseguró que está en el camino correcto para ser recordado como una superestrella de lucha libre y llevar su nombre a la cima como lo han hecho otros mexicanos exitosos.

“He llegado a alturas grandes y esto es el principio para ser tan grande como Rey Mysterio, Alberto del Río, Kalisto, Eddie Guerrero. Estoy iniciado, pero sé que no falta mucho para que el futuro me dé otra oportunidad y la voy a aprovechar, quiero marcar la diferencia”.

Para finalizar, Andrade dejó en claro que todo lo que ha logrado es producto de su esfuerzo, de la historia que lo respalda, pues en todo el mundo ha enfrentado rivales duros que le han enseñado a madurar y a fijarse metas que luzcan inalcanzables para que el sabor de la victoria sea más gratificante.