Adaptarse o morir
Mito: Los equipos que llegan a la Final tienen bien definida su forma de juego.
Realidad: León es el equipo que más tempo tiene la pelota durante los partidos, con 62.6 por ciento, y el que más pases ha intentado en el torneo con 10 mil 672. Los Pumas son el equipo que más centros ha intentado, con 364, y el que más intercepciones de balón tiene, con 815.
Los dos tienen ideas claras de cómo jugar, León con un futbol elaborado con el balón al piso permanentemente. Los Pumas con un estilo vertical y con gran presencia de área, buscando abastecer a sus centros delanteros.
Queda claro que tanto Ambriz como Lillini tienen muy en claro el estilo de juego que tienen sus escuadras y pese a los buenos resultados no son tercos y modifican cuando es necesario de figura táctica y de jugadores.
En la Liguilla los dos pasaron ciertos aprietos por perder el juego de Ida y tuvieron que modificar, los dos sufrieron de lesiones o contagios de Covid-19 y fueron capaces de reorganizarse para tener variantes y seguir sacando resultados.
León comenzó la eliminatoria ante Puebla con el 'Avión' Ramírez, Meneses y Mena, junto a Gigliotti en el ataque.
Abajo en el marcador para el juego de Vuelta ajustó con Navarro como interior junto a Montes.
Para la serie ante Chivas, comenzó con Gigliotti y Campbell en el eje del ataque. El tico anduvo muy bien, pero Gigliotti sigue sin integrarse al equipo en lo futbolístico.
Con el partido empatado regresó a casa para de nuevo modificar, sacó al delantero argentino, dejó en punta a Campbell que jugó bien en la Ida y lo dejó como único atacante.
La historia de Pumas es similar. Arrancó la Liguilla con Álvarez y Waller como los volantes abiertos.
Para el juego de Vuelta no pudo contar con el argentino Álvarez y lo sustituyó Gutiérrez por la banda de la derecha. Pasó la eliminatoria sin mayor problema ante Pachuca.
Ante Cruz Azul repitió la alineación y el resultado fue desastroso un 4-0 que lo obligaba a buscar el milagro. Lillini analizó la línea de tres centrales que le mandó Siboldi y la contrarrestó de forma sorpresiva con el paraguayo González como volante por izquierda, dejando solo a Dinenno en el eje del ataque, sacó al juvenil Lira y metió al experimentado Iniestra, adelantó a Vigón y puso a Iturbe por el sector derecho. El resultado detonó una cruzazuleada histórica.
Conclusiones: Los dos técnicos han tenido la capacidad de adecuarse y modificar para sacar adelante los partidos. Los dominan un estilo de juego, pero son capaces de mutar cuando es necesario. Los dos entendieron que si no evolucionas serás eliminado. Sin duda dos propuestas distintas, respaldadas por un gran trabajo de dos entrenadores que nos demostraron su gran capacidad como estrategas.
