¿Realidad o ficción?
MITO: Chivas y Pumas arrancaron de forma impresionante.
REALIDAD: Necesitamos una confirmación de lo que hicieron en la Jornada 1. Pumas y Chivas golearon de forma escandalosa con actuaciones muy por encima de lo pronosticado.
Andrés Lillini, a ritmo de samba, mejoró en 180% sus tiros a gol en comparación a lo que promedió el torneo pasado y redujo en 80% las opciones de gol del rival.
Por su parte, Marcelo Michel Leaño incrementó en 30% los disparos a gol y en un punto que es fundamental para el pastor del Rebaño es que aumentó en 50% los pases intentados en el partido, rebasando los 550 pases en el juego, muy cercano al estilo Barcelona, que busca el joven entrenador mexicano.
Chivas se adueñó del balón con 70% de posesión, Pumas lo dividió con Toluca a tener 49% de tenencia. Pumas generó más jugadas ofensivas 54 por 44 del Rebaño; 27 tiros a gol de los universitarios por 14 del Guadalajara.
Pumas lo hizo muy parejo, 18 ofensivas por el centro, 18 por derecha y 18 por izquierda; sus ataques más peligrosos se crearon por el centro, ya que 66% de las opciones de gol nacieron por esa zona.
Por su parte, Chivas, al igual que los universitarios, explotó el centro del terreno de juego para crear peligro, ya que 84% de sus opciones de gol fueron concebidas por el centro.
En el posicionamiento táctico, las Chivas fueron más compactas, con extremo jugando de afuera hacia dentro, liberando las bandas para los laterales, los interiores Huerta y Torres pisando detrás de Zaldívar y siempre quedando bien parado atrás con el contención Flores y la pareja de centrales Sepúlveda-Briseño.
Pumas fue más largo, aprovechando el desorden que fueron los Diablos. Con un Favio Álvarez que se encargó en sacar el balón en la primera zona y un par de centro delanteros que constantemente intercambiaban posiciones. Las transiciones rápidas fueron determinantes para aprovechar los espacios y marcar los cinco goles.
CONCLUSIONES: Demasiado bello para ser realidad, muy por encima de lo que podía pronosticar el más optimista de los aficionados. Necesitamos una confirmación ante un rival de mayor jerarquía. Así que la J2 nos podrá decir si Pumas y Chivas son una realidad o ficción.
