12 de Agosto de 2020
Por más que lo quieran hacer árbitro, Adonai Escobedo no aprende, que triste ver un árbitro sin personalidad, jerarquía, y que arbitra con un miedo tremendo, no está para el arbitraje.
En los dos penales que sancionó está a escasos tres metros y tiene que ir al VAR para confirmar su decisión, increíble.
Romo le protestó todo el partido y no se atrevió a expulsarlo, le protestan todo y pierde el control, no hay forma de ver progreso aunque le den partido en todas las jornadas.
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