Las tendencias de este 2021
Mito: Una de las modas es no tener la pelota.
Realidad: Se confirma la tendencia sobre que no es necesario tener el balón para ganar en nuestro futbol. En la jornada uno solo América logró tener más tiempo el esférico que su rival y ganó, otros tres empataron y cinco perdieron pese a tener mayor posesión de la pelota.
Lo que marcó tendencia en los primeros 90 minutos del torneo fue marcar el primer gol, ya que cinco equipos que lo consiguieron terminando ganando (Mazatlán, Rayados, Tigres, América y Santos), dos empataron (Puebla y Juárez) y uno salió derrotado (Gallos Blancos), además de un partido que finalizó 0-0.
En esta radiografía para conocer las modas del futbol mexicano encontramos que 14 de 18 equipos juegan con solo un centrodelantero, nueve equipos utilizan el sistema 1-4-2-3-1, otros cinco juegan 1-4-3-3, tres equipos arman un 1-4-4-2 y solo Tomás Boy utiliza una línea de cinco defensores con un 1-5-3-2.
En cuanto a lo goles se marcaron 21 para un promedio de dos por partido, 13 fueron de las escuadras locales y ocho de los visitantes.
Los gritos de gol tuvieron el siguiente origen: tres fueron de penal, cinco en disparos de larga distancia, seis de remate de cabeza y siete con el pie dentro del área.
En cuanto a la generación ofensiva fueron 25.7 tiros a gol en promedio por partido, de los cuales 7.7 tuvieron dirección a portería y se marcaron 2.3 goles, el torneo pasado el promedio fue 2.5.
Conclusiones: El torneo comenzó con tendencias claras, tener poco el balón, ser contundente frente al marco rival, marcar el primer gol define los encuentros, la condición de local pesa y solo el 30% de los ataque finalizaron en oportunidad clara de gol.
El techo futbolístico de las plantillas es todavía más alto de lo que vimos en estos primeros 90 minutos.
Los equipos prefieren jugar con un solo centrodelantero, con gran número de jugadores en el mediocampo y la línea de cuatro en el fondo es el común denominador. Rocco y Larcamón se presentaron en el futbol mexicano ejerciendo una presión alta. Solari debutó intentando un futbol elaborado y Aguirre aprovechando un gol de vestidor, aunque los dos quedaron lejos de las expectativas que se tenían.
