Christian Martinoli
@martinolimx
Uno de los mejores cronistas deportivos en México, trabaja para TV Azteca y ha colaborado con RÉCORD desde 2010.
Ahí viene el Monterrey
A pesar de que muchos en Nuevo León pensaron que con un técnico con tanta jerarquía como es la que posee Javier Aguirre, haría que Rayados despegara desde el día uno, evidentemente se equivocaron.
Sin embargo, era cuestión de tiempo que la nómina más cara de nuestro futbol poco a poco encontrará las formas y el camino. Obvio, muchos quisieran que Monterrey arrasara, pero con el Vasco el asunto pasa por el orden, la garra y después el ataque.
Aguirre, guardando proporciones y distancias, sólo había tenido en toda su carrera una escuadra con semejantes alcances en plantilla para competir en el torneo local o incluso de manera internacional cuando estuvo en Madrid, ya que antes y después del Atlético, es este proyecto en la Sultana del Norte el que le entrega suficientes armas para que busque el protagonismo de la competencia que le toca disputar.
Un día, por fin, Rayados terminó con la mayoría de las vacas sagradas que anquilosadas por tiempos pasados mejores se sentían en zona de confort y no rendían más, se tardaron por respetar jerarquías, pero movieron el avispero y con eso surgió un efecto dominó que incluso provocó que otros entendieran de forma indirecta que ya con la camiseta del Monterrey no se podía ser complaciente y dubitativo.
Por tal motivo y con algunas caras distintas, este equipo viene encontrando el regreso goleador de Funes Mori, la consistencia de Maxi Meza, el duende y la complicidad ofensiva de Duván Vergara, la recuperación futbolística de 'Ponchito' González, la madurez y estabilidad de 'Charly' Rodríguez, mientras que atrás Aguirre luce feliz con tres caras que son su cimiento y seguridad como Montes, Vegas y Andrada.
Faltan seis partidos de Liga y seis de Liguilla si es que la vieja Pandilla pretende levantar nuevamente el título. En el futbol mexicano lo sabemos todos, lo básico es cerrar bien el certamen regular para llegar encaminado a las Finales, obvio que acumular a estas alturas tres triunfos consecutivos y empezar a meter respeto a los contrincantes es valioso y suma, el asunto es que el Vasco sabe perfectamente que necesita mantener la línea ascendente hasta diciembre porque hoy todo luce transparente y se respira mejor que antes.
No obstante, la mitad de Nuevo León es muy exigente con su club y desea que en el camino rumbo a la Liga también la Concachampions regrese a sus vitrinas, porque aunque es un torneo de dudosa calidad, le ha servido a la entidad regia como bandera de crecimiento e incluso como un bálsamo dentro del folclore local para defenderse de sus primos de San Nicolás, cuando las discusiones de la pelota se acaloran en algún bar.
