La Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) ha emitido una alerta urgente por el aumento del uso de carfentanilo en humanos, un opioide sintético 100 veces más potente que el fentanilo y 10 mil veces más fuerte que la morfina.
Este poderoso sedante, originalmente creado para tranquilizar animales de gran tamaño como elefantes o rinocerontes, no está aprobado para uso humano debido a su extremada toxicidad, pero su presencia en el mercado negro lo ha convertido en una amenaza creciente para la salud pública.
Aumentan muertes por sobredosis
Los datos son alarmantes. De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), el número de muertes relacionadas con carfentanilo pasó de 29 en el primer semestre de 2023 a 238 en el mismo periodo de 2024, un aumento que evidencia la rápida expansión de esta sustancia en las calles.
La DEA ha detectado su uso en al menos 37 estados de Estados Unidos, donde se ha mezclado de forma clandestina con heroína, cocaína y metanfetaminas, muchas veces sin que los consumidores lo sepan.
Un grano puede matar a cualquiera
La potencia del carfentanilo es tal que una dosis de apenas 20 microgramos (0.00002 gramos) puede ser letal para una persona. Se estima que una sola partícula puede causar una sobredosis, lo que ha encendido las alarmas en cuerpos de emergencia y hospitales. El fármaco fue desarrollado por primera vez en 1974 por Janssen Pharmaceutica y es legalmente usado sólo en veterinaria para animales de más de una tonelada de peso.
Se presenta comúnmente como un polvo blanco o amarillento e incluso en versiones más solubles como sales de clorhidrato, citrato u oxalato. Sin embargo, su fabricación ilegal proviene principalmente de China, y su distribución ha encendido alertas internacionales, incluyendo advertencias de la ONU y la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE).
El carfentanilo puede absorberse por contacto con mucosas, inhalación o por la piel en forma líquida, lo que representa un riesgo importante para policías, paramédicos o personal forense que maneje sustancias contaminadas. Aunque no causa sobredosis al tocarlo en polvo o por aire, sí puede tener efectos tóxicos si el contacto es directo y prolongado.
Síntomas y consecuencias de intoxicación
Las señales de intoxicación por carfentanilo incluyen:
- Somnolencia extrema o pérdida de conciencia.
- Desorientación.
- Pupilas contraídas (miosis puntiforme).
- Respiración lenta o dificultad para respirar (depresión respiratoria).
- Piel fría y húmeda.
- Posible paro respiratorio, la causa principal de muerte por sobredosis.
Un llamado a la prevención
La DEA, en conjunto con agencias de salud, recomienda a la población extremar precauciones, sobre todo si se consumen sustancias adquiridas en el mercado ilegal, ya que muchas veces pueden estar adulteradas con carfentanilo sin que el consumidor lo sepa. Los primeros auxilios inmediatos en caso de sospecha de sobredosis deben incluir la administración de naloxona, aunque se requieren dosis mayores que las usadas contra el fentanilo para contrarrestar el efecto del carfentanilo.
La expansión de opioides ultrapotentes como el carfentanilo representa un nuevo nivel de emergencia sanitaria. La comunidad internacional observa con preocupación su crecimiento, mientras las autoridades estadounidenses intensifican sus operativos de control y prevención para evitar una nueva ola de muertes.
