El Real Madrid sigue su pulso en LaLiga con el Barcelona (cuatro puntos de ventaja) tras ganar, con alguna dificultad final, al Celta de Vigo (3-2) y todo en la semana previa a El Clásico del próximo domingo que definirá las opciones futuras del equipo blanco en lo que resta de campeonato.
El partido, jugado en una hora inusual (14.00 horas en España), fue bastante raro, con una primera parte espectacular del equipo madridista, incluyendo dos goles de Mbappé, y una segunda parte en la que el Madrid se durmió, recibió dos goles y apunto estuvo de ser empatado por el equipo vigués.
El conjunto de Ancelotti, la figura en la que están puestos todos los focos ahora mismo, voló en una primera parte en la que Kylian Mbappé se fue hasta los 36 goles totales en esta temporada, a un solo tanto del récord histórico del chileno Iván Zamorano, que con 37 es el debutante más goleador en la historia blanca. Kylian fue la estrella de un primer acto colosal y que mantiene al Madrid en la pelea por el único título que aún disputa, quitando el Mundial de Clubes.
En la segunda parte, el Celta aprovechó la siesta madridista, que acabó sin ningún defensa propio y con algún miembro de la cantera como Jacobo. Se notó… y el equipo visitante se quedó a un tanto de un sorprendente empate que no llegó.
