MARIO ALMAGUER
En franco homenaje satirizado a las telenovelas y cintas de tipo B de décadas pasadas, con un tinte de ‘spaguetti western’ y gotas
de narcotráfico mexicano, aderezado con diversión, es como Will Ferrell encabeza junto a Diego Luna y Gael García Bernal la cinta ‘Casa de mi Padre’.
Estrenada este viernes en salas de México, el filme, dirigido por Matt Piedmont, sirvió para la productora Lemon Films y su inversión extranjera como una posibilidad de hacer reír al público mexicano.
Will, quien en toda la cinta habla en español, confirmó lo complejo que fue realizar esto para aportar una dosis extra de absurdo.
En cuanto al recurrente hecho de cuestionar por qué hablar de nuevo del tema del narcotráfico, Will manifestó: "De donde vengo se piensa que es una película de narcotraficantes, pero en realidad es una oportunidad para que cambie la percepción de la frontera, para que México sepa realmente cómo es EU y para que EU sepa cómo es México".
Por su parte, Diego abundó acerca del tema y manifestó que lo propuesto en la trama invita a la reflexión.
"A través de la sátira y la burla se pueden hacer muchas cosas, ‘Casa de mi Padre’ tiene un comentario acerca de la percepción que hay en México, sobre quienes viven en Estados Unidos y viceversa y logra, a través de la comedia y la ironía, dejar ese comentario para que la gente lo recoja y a ver dónde lo lleva”.




