El Chelsea consiguió una victoria sólida 0-2 en su visita a Burnley, en un partido donde el control del ritmo y la contundencia en momentos clave marcaron la diferencia. Desde los primeros minutos, los Blues mostraron una postura vertical, aunque el juego comenzó con un susto inesperada por un golpe a Enzo Fernández al minuto 2.
Burnley intentó responder desde el arranque con presión alta, pero Chelsea generó peligro rápidamente. A los cinco minutos, Robert Sánchez buscó un pase largo que terminó en fuera de juego de João Pedro, anunciando la intención del equipo londinense de atacar con profundidad. Minutos después, Loum Tchaouna y Jaidon Anthony encendieron las alarmas en el área rival con remates que exigieron a la defensa visitante.
¿Quién tomó el control del partido?
Chelsea comenzó a asentarse pasada la primera decena del juego, con intentos claros como el disparo de Liam Delap al minuto 8, aunque sin dirección de portería. Burnley respondió con intensidad, pero sus aproximaciones chocaron una y otra vez con los zagueros azules. Las faltas y duelos divididos marcaron un tramo físico, ejemplificado por la infracción sobre Delap en campo contrario al minuto 35.
El momento clave llegó al minuto 36, cuando Pedro Neto abrió el marcador con un remate de cabeza a quemarropa, culminando un pase profundo de Jamie Gittens. El gol cambió por completo las sensaciones del encuentro, entregando al Chelsea la confianza para manejar los tiempos y obligando al Burnley a arriesgar más en ataque.
El cierre del encuentro y el golpe definitivo
En la segunda mitad, Burnley salió decidido a encontrar el empate, pero Chelsea mantuvo la solidez defensiva e incluso generó nuevas oportunidades. Al minuto 53, Marc Cucurella remató dentro del área, aunque su disparo fue rechazado por la zaga local. Burnley tuvo una de sus llegadas más claras al 68’, cuando Zian Flemming falló un tiro franco que se fue por encima del travesaño.
Con el partido acercándose al final, Chelsea aprovechó los espacios dejados por un Burnley volcado al frente. En el minuto 87, Enzo Fernández (quien se había repuesto de su golpe inicial) marcó el 0-2 tras un remate raso dentro del área, luego de un contraataque perfectamente dirigido por Marc Guiu. El tanto significó el golpe definitivo para la escuadra local.
Aún en tiempo añadido, Burnley intentó el descuento con un disparo de Armando Broja al minuto 95, detenido a ras de suelo por la defensa del Chelsea. Sin más que hacer, el encuentro concluyó con una victoria clara para los Blues, quienes demostraron eficacia, orden y capacidad para castigar en los momentos decisivos.
Tras el resultado, el equipo de los Blues se coloca como segundo lugar de la Premier League, a espera del juego entre el Manchester City ante Newcastle. Por su parte, Burnley se queda en la posición 18, rayando la zona de descenso.
