En medio de una creciente ola de especulaciones sobre su posible desaparición y la venta de su franquicia, el Mazatlán FC ha optado por un movimiento audaz: ha iniciado la venta de abonos para el próximo torneo. Esta acción de la directiva sinaloense se da justo cuando reportes periodísticos sugieren que el club podría estar viviendo sus últimos torneos en la Liga MX.
Según información del periodista Fernando Cevallos de Fox, las negociaciones para que el Atlante adquiera la franquicia están "muy avanzadas". El rumor indica que el acuerdo se sometería a votación en la Junta de Dueños de diciembre de 2025, con la posible mudanza concretándose después del Mundial de 2026. Esta sombra de incertidumbre rodea al club desde hace tiempo, avivada por los constantes fracasos deportivos y la falta de Liguilla.
Mazatlán vende abonos en medio de rumores
A pesar de la posible mudanza, el Mazatlán FC busca consolidar el apoyo de su afición con la promoción de sus pases de temporada. La estrategia parece ser doble: generar ingresos esenciales en un momento económicamente delicado y, al mismo tiempo, proyectar una imagen de estabilidad y continuidad que contrarreste las versiones de un inminente adiós.
La franquicia del Mazatlán FC nació en 2020, ocupando la plaza del desaparecido y tradicional Monarcas Morelia, un movimiento que le granjeó un fuerte rechazo inicial de gran parte de la afición mexicana. Cinco años después, la falta de resultados deportivos ha intensificado las críticas, haciendo que el rumor de una venta al Atlante, un club con gran historia, cobre más fuerza entre los seguidores del futbol.
¿Qué pasaría con los abonados en caso de que Mazatlán se vaya?
La venta de abonos pone a la afición mazatleca en una encrucijada. Si bien el club asegura un lugar en el estadio y beneficios, el riesgo de que la franquicia desaparezca o se traslade a la Ciudad de México con el Atlante después del Apertura 2025 y el Mundial 2026 es real. Esta situación exige un acto de fe y lealtad por parte de los seguidores más fieles.
El posible comprador, el Atlante, es uno de los pocos equipos en la Liga Expansión MX que cumple con la certificación para ascender a la máxima categoría. La falta de ascenso y descenso ha frustrado sus planes, lo que hace de la compra de una plaza existente, como la de Mazatlán, una vía directa para su anhelado regreso a la Liga MX y su posible vuelta al Estadio Azteca.
Hasta el momento, la directiva del Grupo Salinas ha mantenido silencio oficial respecto a la posible transacción, dejando que el rumor crezca y que la venta de abonos se convierta en la única acción tangible que comunica un mensaje de "aquí seguimos". La respuesta de la afición a esta campaña de abonos será un termómetro clave sobre el apoyo real al equipo en medio de la crisis de identidad.
Todos los caminos apuntan a la Junta de Dueños de la Liga MX en diciembre de 2025 como el momento decisivo donde se definirá el futuro del Mazatlán FC. Mientras tanto, la venta de abonos se convierte en un símbolo de la lucha del club por sobrevivir a los reportes y mantener vivo el proyecto del fútbol en el estado de Sinaloa.
