El SoFi Stadium se llenó de amarillo y negro con un gran número de 'Toallas Terribles' en las gradas, sin embargo, en el terreno el azul celeste dominó a placer y electrocutó al acero. Los Angeles Chargers (7-3) derrotaron y dominaron a los Pittsburgh Steelers (5-4), en un partido que quedó marcado por el gran juego en las trincheras de los Cargadores y los errores en la ofensiva y equipos especiales de los de Pensilvania.
Los primeros en romper el cero fueron los Acereros, con un gol de campo de 59 yardas de Chris Boswell, lo que significó los primeros tres puntos que hicieron hasta el último cuarto. Pese a que Pittsburgh resistió los primeros embates de Justin Herbert, la defensiva de los Chargers demostró su gran nivel en los apresuramientos y capturas a Aaron Rodgers.
Khalil Mack hizo la primera captura para los angelinos, que también significó los primeros puntos para los Chargers. El linebacker y uno de los mejores cazadores de cabeza de Los Angeles, capturó al cuatro veces MVP en las diagonales, lo que provocó el safety. Ambas ofensivas tardaron en carburar después de eso, pero Justin Herbert demostró porque es uno de los mejores mariscales de campo de la actualidad.
Después de una intercepción a Aaron Rodgers por parte del safety R.J. Mickens, los Chargers tuvieron una última oportunidad en la primera mitad, que terminó con un viaje a zona roja y las diagonales. Justin Herbert encontró completamente solo a Ladd McConkey, y la ventaja de Los Angeles creció 3-12 en el segundo cuarto.
Dominio electrizante en la segunda mitad
Los Chargers dejaron escapar la primera serie ofensiva y hasta se dieron el lujo de fallar un gol de campo en el tercer cuarto, pero el equipo de Mike Tomlin nunca apareció. Aaron Rodgers y los suyos tuvieron un momento crítico al principio del último cuarto, con una cuarta oportunidad en la yarda 10.
Los Steelers tenían que avanzar tan solo seis yardas para mantener con vida su ofensiva, por lo que Rodgers buscó a su receptor estrella, D.K. Metcalf, quien fue muy bien defendido por el esquinero Cam Hart, lo que terminó en la pérdida de downs. Después de esa jugada la ofensiva de los Chargers se encargó de doblar a una cortina de acero que terminó por caer.
Rodgers intentó un par de veces más, pero un balón que soltó Calvin Austin terminó por ser la segunda intercepción definitiva. Pittsburgh se metió al final a las diagonales con un touchdown de Roman Wilson, pero eso terminó por maquillar el resultado final, que quedó 10-25.
¿Qué récord rompió Keenan Allen?
El veterano receptor de los Chargers rompió la marca de 955 recepciones en la franquicia angelina, que era de Antonio Gates. Keenan Allen se mantuvo en uno de los últimos drives para romper la marca de su excompañero, con el cual se fundió en un abrazo después de la ya histórica recepción.
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