La lucha libre es una gran familia

¡Iuuuuuuu! Morras y compas, ¿cómo les va en este Sábado de Gloria? me imagino que a todas margaritas porque están disfrutando de la compañía de todos sus seres queridos. Acá, su columnista de cabecera también anda muy contento porque aunque no tengo vacaciones, en cada función disfruto del cariño de nuevos amigos, como sucedió en la Feria de Texcoco 2019.

Déjenme les presumo que además del trofeo de tan fino y educado evento, me traje la troca llena de regalos del público, lo cual les agradezco desde el fondo de mi corazón, porque me emociona contar con su aprobación para mi carrera luchística después de tantos y tantos años.

¡Wow! y qué les digo de mi familia de Lucha Libre AAA Worldwide, también aprovechamos el tiempo antes de la función para ponernos al día, cotorrear bien machín y hasta para echarnos una torta de tamal y un atole de chocolate, cortesía del buen Máximo.

Y es que la lucha libre nos da la oportunidad de pasar un buen rato en familia, tanto en los vestidores como en las gradas con las ocurrencias del público y de los compañeros.

Sin duda todo esto que les estoy platicando fue uno de los ingredientes principales del éxito de la función de AAA en Texcoco. ¡Claro! sin olvidar el impresionante espectáculo mexicano, con charros, adelitas y toda la cosa, además de la gallardía de Pagano y Myzteziz Jr., quienes llegaron hasta el ring en los impresionantes caballos de los ranchos, Molino Blanco y Rancho Los 2 Potrillos.

En fin, así es mi amado deporte, un espectáculo para toda la familia, el cual seguiremos disfrutando, si ustedes nos lo permiten, por muchos, muchos años. ¡Hasta la próxima!