La mañana de este jueves 13 de noviembre amaneció con tensión en el corazón político del país: docentes de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) protagonizaron un intento de irrupción en Palacio Nacional, desatando un fuerte dispositivo de seguridad en el Centro Histórico de la Ciudad de México.
Desde la madrugada, contingentes provenientes de varios estados del país comenzaron a concentrarse en las inmediaciones del Zócalo, portando mantas, palos y tubos, con el objetivo de hacer presencia durante la conferencia matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum.

Buscaban “portazo” en Palacio
El momento más álgido ocurrió en la calle Moneda, donde un grupo de manifestantes utilizó objetos metálicos y tubos para golpear y derribar las vallas colocadas por autoridades. Los elementos de seguridad respondieron con humo de extintores, buscando dispersar la multitud.
“Las cosas no pasaron a mayores, pero los integrantes de la CNTE continuarán con sus protestas este jueves y viernes”, confirmaron fuentes en el lugar.

La escena recordó protestas anteriores de la CNTE, pero ahora bajo el nuevo gobierno federal, al que exigen la reinstalación de mesas de diálogo y cambios en la política educativa.
Operativo y caos vial
Para contener cualquier intento de ingreso al recinto presidencial, la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) desplegó un amplio operativo con al menos tres filas de vallas metálicas y cientos de elementos policiacos.

Los cierres viales generaron un verdadero caos en las principales avenidas del Centro:
- Eje Central Lázaro Cárdenas
- Eje 1 Norte
- José María Izazaga
- Circunvalación

Las autoridades recomendaron evitar la zona y tomar alternativas como Fray Servando Teresa de Mier o República de El Salvador.
A pesar de la tensión, no se reportaron enfrentamientos graves ni personas lesionadas. La CNTE anunció que mantendrá su protesta durante el viernes, lo que anticipa más afectaciones en la zona centro de la capital.




