Malas noticias sacudieron al Real Madrid durante el duelo ante el Celta de Vigo, en el partido correspondiente a la Jornada 16 de LaLiga, en el Santiago Bernabéu, cuando Eder Militao tuvo que abandonar el partido apenas a los 20 minutos.
El central brasileño cayó al césped tras una disputa con Pablo Durán y de inmediato pidió la asistencia médica, pese a creer que se podía tratar solamente de un golpe, los rostros de dolor y preocupación del jugador solo evidenciaron que no podía continuar.
El defensa dejó el terreno de juego con un gesto serio y sin poder apoyar la pierna derecha, encendiendo las alarmas del cuerpo técnico. En su lugar ingresó Antonio Rüdiger, quien tomó el mando de la zaga en un momento crítico para el equipo dirigido por Xabi Alonso.
¿Qué se sabe de la lesión del central brasileño?
De acuerdo con las primeras impresiones en el campo, Militao sintió un fuerte dolor en la parte posterior del muslo derecho durante una carrera defensiva. La forma en que abandonó el césped, visiblemente cojeando, aumentó la preocupación en el entorno madridista, especialmente por el historial reciente de lesiones que ha afectado al plantel.
Los reportes preliminares señalan que una lesión muscular de este tipo podría dejarlo fuera entre tres y cuatro semanas, aunque todo dependerá de los diagnósticos médicos que se realicen en las próximas horas. El club espera confirmar el alcance exacto mediante pruebas de imagen.
Militao se perderá duelos clave con el Real Madrid
La situación complica al Real Madrid, que ya venía justo de efectivos en la defensa y había tenido que recurrir a Carreras como central en jornadas anteriores. Ahora, con Militao nuevamente de baja, Xabi deberá reorganizar su línea defensiva para los compromisos que se avecinan.
Lo que sí parece un hecho es que el brasileño no podrá estar en el duelo de Champions League ante el Manchester City, uno de los más importantes del calendario. Además, también quedará descartado para el partido de Liga contra el Alavés, compromisos en los que su presencia habría sido fundamental.
La situación sin duda cayó como un balde de agua fría tanto para el equipo como el jugador, pues este apenas estaba saliendo de una lesión que lo había dejado fuera de las canchas algunas semanas.
