Mundial 2026: ¿Cuánto vale la Selección de Haití?

Tuvieron que pasar más de 50 años para que la Selección de Haití volviera  una Copa del Mundo, ahora desde su última participación en el ya lejano Mundial de Alemania 1974, regresan con una de las historias más emotivas de las Eliminatorias de la Concacaf, al ser una de las selecciones con menos valor en el mercado.

¿Cuál es el valor de Haití?

La historia de Haití durante estas últimas eliminatorias es de auténtica resiliencia; desde su localía administrativa en todas las eliminatorias (debido a problemas sociales de su país), su inmortal guardameta y su limitada plantilla que sin la necesidad de tener nombre de alto calibre o talla internacional, le mostraron al mundo lo que un buen futbol puede lograr.

Con toda la adversidad en su contra, Haití llegará a la Copa del Mundo de 2026 con un valor de apenas 40.38 millones de euros (según Transfermarkt), siendo una de las selecciones menos valiosas de la fiesta del verano.

Dentro de sus filas, los jugadores más caros apenas rondan los 2.5 millones de euros, a excepción de su estrella, el mediocampista del Wolverhampton, Jean-Ricner Bellegarde, quien tiene un valor estimado de 18 millones de euros. Muy atrás de Bellegarde están Josué Casimir (4 millones) y  Frantzdy Pierrot (3.20 millones).

El contraste de la selección caribeña se pone en evidencia a lado de los más valioso no solo del mundo, sino de su confederación misma, pues  aun lado de la selección más valiosa de Concacaf (Estados Unidos) la cual tiene un valor de 156.30 millones de euros, mostrando una diferencia importante, además de contar con un jugador que vale más que todo Haití, Christian Pulisic (80 millones de euros).

Jugadores ‘sencillos’ equipo valioso

A pesar de estas diferencias económicas y de infraestructura, Haití se ha convertido en uno de los ejemplos más inspiradores del camino rumbo al Mundial 2026. Su clasificación no solo representa un logro deportivo, sino también un mensaje de esperanza para un país que ha atravesado profundas crisis sociales y políticas.

Además, el impacto de esta histórica clasificación ya comienza a sentirse en la afición haitiana, que ha encontrado en su selección un motivo de unión y alegría. Las celebraciones en diversas ciudades del Caribe y en comunidades haitianas alrededor del mundo reflejan la magnitud del logro. Para muchos jóvenes futbolistas, esta generación se ha transformado en un ejemplo de que el talento puede florecer incluso en medio de la adversidad.

Con su boleto asegurado, Haití busca ahora prepararse de la mejor manera para enfrentar a selecciones con mayor poderío económico y futbolístico. Su objetivo no solo será competir, sino demostrar que el corazón y la disciplina pueden equilibrar la balanza ante planteles repletos de estrellas. La expectativa es que su participación en el Mundial de 2026 marque un antes y un después para el futbol haitiano y su proyección internacional.