Para ser campeón hay que saber sufrir y sufrir fue lo que hizo Barcelona en el juego de ida de la Semifinal de Champions League. Dos veces vino de atrás el equipo de Hansi Flick -la primera en una diferencia de dos goles- para empatar 3-3 en el Estadio Olímpico de Montjuic.
La inspiración de Lamine Yamal y la precisión de Pedri le permitieron al Barça reponerse después de un adverso 0-2. Mientras que en la segunda mitad, la Diosa Fortuna se vistió de blaugrana y un autogol de Yann Sommer le dio vida de nuevo a los catalanes.
Gol de vestidor y la Masía al rescate
Si Ousmane Dembélé presumió ante Arsenal uno de los goles más rápidos en la historia de Semifinales de la Champions League, Marcus Thuram lo dejó atrás sin problema este miércoles. Treinta segundos habían pasado cuando el atacante aprovechó un resbalón de Íñigo Martínez para hacer le primer tanto con un 'taquito' de aire.
Barcelona se volcó al ataque para buscar el empate, pero Sommer se mantuvo invencible bajo los tres palos. El arquero suizo le dio vida a Inter que con un remate de tijera de Denzel Dumfries puso el 0-2 al 21'.
Pero el juego estaba lejos de quedar liquidado y con una jugada individual, de esa que solo puede hacer un chaval de 17 años, Lamine puso el empate. El canterano desbordó por derecha y tras meterse al área, entre tres rivales sacó un zurdazo tres minutos más tarde.
Reanimados, los blaugranas mantuvieron el asedio y en un servicio largo de Pedri, Raphinha recentró de cabeza para el arriba de Ferran Torres. El atacante, única opción por ahora ante la ausencia de Robert Lewandowski, había fallado un par previamente, pero en esta ocasión no erró el 2-2 al 37'.
La suerte se vistió de blaugrana
Con el empate 2-2 y un lesionado por bando, Lautaro Martínez por Inter y Jules Koundé por Barcelona, el encuentro se mantuvo de nuevo al ritmo de los locales. Pero una nueva desatención defensiva, en una mala salida de Wojciech Szczesny, permitió el doblete de Dumfries al 63'.
La reacción fue inmediata una vez más en una gran jugada, nuevamente con Yamal bajo reflectores dos minutos más tarde. Tras un cobro de esquina, Frenkie de Jong cedió para el canterano que la dejó pasar para Raphinha, que la prendió de primera y directo al arco.
El balón pegó inicialmente en el travesaño, pero el rebote pegó en la espalda de Sommer y sentenció el empate. Barcelona todavía pudo remontar, pero la suerte ya no fue suficiente y la escuadra le dijo que no a Lamine en los último minutos. Ahora los blaugranas buscarán su pase a la Final la próxima semana en el Giusseppe Meazza.
