El inicio del Apertura 2025 trae consigo un partido que concentra reflectores y esperanza. Cruz Azul recibe al Mazatlán FC en el Estadio Olímpico Universitario, en un duelo que cierra la jornada sabatina y marca el debut oficial de Nicolás Larcamón como estratega cementero.
El semestre pasado fue una verdadera montaña rusa para los celestes, que pasaron de la inestabilidad a un cierre digno y, ahora, con Larcamón en el timón, la exigencia crece. Cruz Azul no levanta el trofeo desde hace cuatro años y sueña con romper esa sequía para volver a sentarse en el trono del futbol mexicano, arrebatándole la corona al vigente campeón Toluca.
Para demostrar que están listos para pelear, los Cementeros saben que no pueden fallar en su debut, sobre todo ante un rival que llega con dudas. Mazatlán terminó el torneo anterior como uno de los peores equipos de la Liga MX, con solo cuatro victorias y el pago de multa incluido por su bajo desempeño en la tabla de cocientes. Sin embargo, los partidos se ganan en la cancha y no en la estadística.
Cruz Azul luce renovado con una plantilla sólida que combina experiencia y talento. A jugadores clave como Kevin Mier, Willer Ditta, Gonzalo Piovi y Carlos Rodríguez, se suman nombres como José Paradela, y el club está por cerrar las incorporaciones de Luka Jovic y Jeremy Márquez, quienes prometen fortalecer la ofensiva celeste y brindar alternativas a Larcamón para su esquema dinámico y vertical.
Del otro lado, los Cañoneros presentan a un viejo conocido de La Máquina: Robert Dante Siboldi. El técnico uruguayo toma las riendas de Mazatlán con la misión de despertar a un equipo que desde su creación en 2020 no encuentra estabilidad ni protagonismo. El debut ante Cruz Azul será la primera prueba de fuego para un proyecto que busca ilusionar a su afición sinaloense.




