El mundo del futbol americano está de luto tras el fallecimiento de George Atkinson a los 78 años, legendario safety de los Oakland Raiders, ahora conocidos como Las Vegas Raiders. Su familia confirmó la noticia y remarcó que su legado va más allá de los logros deportivos, al incluir una batalla pública contra la Encefalopatía traumática crónica (CTE) y una historia familiar marcada por la tragedia.
Atkinson fue una figura emblemática en la época dorada de los Raiders de los años 70, recordado por su estilo duro y agresivo en la defensa, e involucrado luego en el debate sobre la salud de los jugadores al retirarse. Su muerte reabre preguntas sobre el impacto a largo plazo del deporte de alto nivel en la salud de los atletas.

Su legado en los Raiders y el impacto en la NFL
Durante su carrera, George Atkinson fue parte del famoso conjunto conocido como la “Soul Patrol”, junto a figuras como Jack Tatum y Willie Brown, que definió la identidad defensiva del equipo en la década de los setenta. Se incorporó a los Raiders en 1968 y fue pieza clave en la conquista del Super Bowl XI, demostrando un estilo de juego físico y sin concesiones que marcó una era.
Más allá de sus estadísticas, Atkinson se mantuvo ligado al club tras su retiro, asumiendo roles como embajador y comentarista, lo que le permitió seguir influyendo en la organización y en la afición que aún le recuerda como un símbolo de la “mística Raider”, basada en agresividad, lealtad y orgullo.

Tragedia personal y lucha contra la CTE
Aunque no se dio una causa oficial de muerte, Atkinson había reconocido públicamente que experimentó síntomas compatibles con la CTE, una enfermedad ligada a los impactos craneales repetidos frecuentes en el futbol americano. Su testimonio lo convirtió en una voz respetada en la conversación sobre el cuidado de los jugadores después del retiro.
La historia de su familia añade otro capítulo doloroso: sus hijos gemelos, George Atkinson III y Josh Atkinson, ambos futbolistas destacados, murieron en años consecutivos (2018-2019) y fueron diagnosticados póstumamente con CTE. Atkinson padre habló abiertamente sobre la depresión, la pérdida y la carga emocional de ver a sus hijos sufrir, reflejando el lado humano de un deporte brutal.

Reflexión sobre la seguridad y el legado del deporte
La muerte de George Atkinson trae al primer plano nuevamente la conversación sobre la seguridad de los jugadores en la NFL y las consecuencias de una carrera profesional bajo riesgo de impactos constantes. La historia de Atkinson y su familia se ha convertido en ejemplo de los peligros que pueden acechar tras la fama y los éxitos deportivos.
Para los Raiders y la NFL en general, el legado de Atkinson sirve como recordatorio de que la gloria en el campo puede venir acompañada de daños invisibles fuera de él. Su vida invita a evaluar cómo se trata a los jugadores después del retiro, tanto desde el punto de vista médico como psicológico.





