Porque no todo lo que brilla en la tele es oro, muchos actores que alguna vez reinaron en las telenovelas de Televisa ahora se ganan la vida lejos de los reflectores, vendiendo tacos, manejando taxis o maquillando clientas.
Aunque suene como caída del cielo al suelo, la realidad es que no está mal… solo es distinta. Esta es la historia de quienes cambiaron los foros por trabajos comunes y corrientes.
De actriz a estilista: Marisol Santacruz
La inolvidable tía Pelucas de Carita de Ángel colgó los libretos tras casi 25 años de carrera y, al quedarse sin llamados, decidió emprender. “Poner uñas y maquillar a mis clientas me deja más tiempo con mi hijo”, compartió Santacruz, quien ahora tiene su propio salón de belleza.
Adela Noriega, ¿adiós para siempre?
Dejó la actuación y desapareció del mapa. Aunque se dice que se dedica a los bienes raíces, nadie lo ha confirmado. Su hermetismo es legendario, pero el público la sigue recordando como una de las reinas de la televisión mexicana.
Allisson Lozz, de niña estrella a vendedora por catálogo
Tras varios papeles en novelas infantiles, Allisson Lozz se retiró completamente del medio. “Fue una experiencia que no me dejó un buen sabor de boca”, explicó en entrevistas. Ahora está casada y se dedica a vender productos de belleza.
Pilar Montenegro, entre propiedades y negocios
La ex Garibaldi se alejó de los escenarios por motivos no confirmados, aunque se especula que su salud influyó. En 2004 fundó una disquera y se metió en bienes raíces. Hoy vive de las rentas.
Nailea Norvind, actriz y comerciante orgánica
Con clásicos como Quinceañera en su currículo, Norvind pausó su carrera durante la pandemia para dedicarse a la cocina y venta de alimentos orgánicos. Se le puede encontrar en bazares y mercados vendiendo sus productos.
Alejandra Procuna, de villana a conductora de app
Sin llamados, en 2017 se convirtió en conductora de aplicaciones. “Volvería a ser taxista si fuera necesario”, dijo la actriz, quien en 2021 reapareció en la telenovela La mexicana y el güero.
Carlos Miguel, de la fama a los tacos
Se hizo popular en Dos mujeres, un camino, pero un secuestro en 2012 lo sacó del medio. Su salud y economía quedaron afectadas, y hoy vende tacos. Busca una vida más tranquila, lejos del escándalo.
Pablo Azar: de galán a chofer
Actuó en Corazón valiente y Hasta que te conocí. Al mudarse a Estados Unidos, la fama no le alcanzó, así que comenzó a trabajar como taxista. “Al principio me daba pena, la gente piensa que los famosos son ricos”, confesó.
