Una potente explosión sacudió la noche del pasado viernes el Parque Industrial de Spegazzini, en Ezeiza, provincia de Buenos Aires, dejando una estela de destrucción, más de 20 heridos y un incendio de gran magnitud que consumió varias fábricas.
La detonación generó una columna de humo denso y naranja que fue visible a kilómetros de distancia. La onda expansiva rompió vidrios, cimbró casas y provocó pánico entre los vecinos.
“El mensaje fue: ‘¡cierren puertas y ventanas y no salgan de casa!’”, relató el cantante Paz Martínez, vecino de la zona. “Sentimos la explosión y pensamos que se nos caían todos los vidrios encima”.
Más de 20 heridos y hospitales en alerta
Las autoridades confirmaron que 24 personas fueron atendidas por lesiones leves, la mayoría por cortes, golpes e inhalación de humo. Una mujer embarazada fue hospitalizada por intoxicación, pero está fuera de peligro. También se reportó a un directivo con un infarto, quien fue estabilizado.
“El sistema de salud bonaerense sostuvo un operativo articulado entre hospitales y el Sistema de Emergencias, con más de 25 móviles”, informó el Ministerio de Salud. “No hay personas heridas de gravedad ni reportes de personas desaparecidas”.
El Centro Provincial de Toxicología recibió más de 45 llamadas de emergencia relacionadas con el incidente.
Fábricas destruidas y fuego fuera de control
Al menos 10 a 12 empresas resultaron afectadas. Entre ellas se encuentran Iron Mountain, Aditivos Alimentarios, Larroca Minera y Almacén de Frío. “Estábamos protegiendo especialmente a la empresa Flamia, que almacena productos inflamables”, indicó un reporte oficial a las 6:15 a. m.
Fabián García, director de Defensa Civil de la provincia, señaló: “La situación nunca estuvo fuera de control para el riesgo de la población. Es un incendio complicado y muy largo. A lo que vamos a apuntar es a evitar su propagación”.
Hasta esta mañana, seguían activos algunos focos, y se estima que podrían tardar al menos 36 horas más en extinguirse por completo.
¿Qué provocó la explosión?
Aunque versiones preliminares apuntan a que el fuego comenzó en una nave con químicos y materiales inflamables, no hay una causa confirmada. Autoridades ya investigan lo ocurrido y descartaron que haya sido provocado por un accidente aéreo.
“La explosión se sintió a kilómetros. La nube negra tapó todo”, dijeron vecinos. Por precaución, se ordenó mantener cerradas puertas y ventanas. A pesar de lo aparatoso del incidente, el aeropuerto internacional de Ezeiza no suspendió vuelos.
