Como ya es tradición, RÉCORD reconoció a lo más destacado del Torneo Clausura 2016, en el que la afición eligió a Carlos Sánchez como el mejor jugador del certamen, a pesar de que no logró ser campeón con Monterrey.
El mediocampista uruguayo vivió con los Rayados su mejor torneo como goleador, al marcar nueve dianas entre Liga y Liguilla, superando la producción que tuvo con River Plate, en donde registró siete tantos en un año futbolístico.
El Pato fue uno de los mejores refuerzos que llegaron a Rayados; su efectivad de pases fue de 77.6 por ciento y recuperó un total de 83 balones, además, marcó un gol cada 195 minutos.
No sólo es el jugador del torneo, el charrúa fue elegido el mejor volante por derecha, a pesar de que Elías Hernández se consagró como el mejor pasador de la Liga, y se desempeña por esa zona de la cancha.
Otro jugador que destacó en el torneo es el francés André-Pierre Gignac, quien desde que llegó a México no ha dejado de sobresalir semana a semana, lo que derivó en el título de goleo del campeonato pasado con 13 tantos.
El galo superó en las votaciones a futbolistas de la talla de Oribe Peralta, Mauro Boselli y Jorge Benítez, que también destacaron por marcar una buena cantidad de anotaciones.
La competencia por el mejor portero fue cerrada entre Hugo González, de América; Rodolfo Cota, de Chivas y Agustín Marchesín, de Santos; sin embargo, fue éste último quien se quedó con el reconocimiento por un margen estrecho.
En cuanto al mejor entrenador, la pelea fue cerrada entre Antonio Mohamed y Diego Alonso, pero el título catapultó al uruguayo por encima del Turco y se consolidó como el mejor estratega del certamen.
Otros futbolistas destacados fueron Edwin Cardona, Rubens Sambueza, Guido Pizarro, Paul Aguilar y José María Basanta.
LA ATAJADA
En la Final de Vuelta, el Conejo Pérez tapó hasta tres disparos, primero a Dorlan Pabón, y luego un par a Rogelio Funes Mori, el segundo de manera espectacular, para mantener el cero a cero en el marcador.
EL MEJOR GOL
En la Fecha 14, Pumas recibió a Morelia en un juego por la noche, donde Javier Cortés se quitó la marca de un defensa tras una pared con Ludueña, para quedar de frente a la portería y picar el balón, techando así al portero rival.
