El entrenador del AC Milan, Massimiliano Allegri, transformó una pregunta sobre la suplencia de Santi Giménez en uno de los momentos más cómicos de la jornada al responderle directamente al legendario exfutbolista y ahora comentarista, Christian Vieri.

Tras la victoria 2-1 del Milan sobre la Fiorentina, Vieri cuestionó a Allegri sobre por qué el delantero mexicano no inició el partido, una decisión que dejó a Rafael Leao como la principal referencia en ataque, y que a la postre le daría un doblete al portugués.
¿Qué dijo Allegri de Giménez?
Allegri, con su característico sentido del humor, justificó la suplencia de Giménez no solo como una decisión estratégica, sino como una necesidad de tener un "as bajo la manga" en la banca. No obstante, enmarcó su explicación con una pícara respuesta a su interlocutor:
“Si te hubiera tenido en el banquillo, quizá habría puesto a Giménez de titular (dirigiéndose a Vieri). Bromas aparte, si lo hubiera puesto de titular, no habría tenido a ningún otro delantero en el banquillo”, declaró Allegri entre risas.

Con esta ingeniosa frase, Allegri confirmó que Santi Giménez era su única alternativa de ataque pura en la banca, y que su presencia como revulsivo era fundamental para tener una opción de cambio que pudiera decantar el partido, tal como ocurrió.
Revulsivo mexicano
La decisión de guardar a Giménez resultó ser un éxito. El mexicano ingresó en la segunda parte y fue clave, logrando forzar el penal que significó uno de los goles del triunfo. Allegri defendió su elección táctica, señalando que la entrada de Giménez en la segunda mitad le dio a Leao más libertad de movimiento.
“Cuando (Leao) tuvo a Giménez en la segunda mitad, sin duda tuvo más libertad de movimiento. Sin embargo, también puedes acostumbrarte a jugar sin delantero centro, porque esta noche Fofana, sobre todo en la segunda mitad, empezó a desbordar como mediocampista, y esa es una ventaja muy importante", declaró el DT.
El técnico también explicó que la amonestación del lateral Zachary Athekame fue el factor decisivo para que el delantero azteca entrara en acción. "Esperé el cambio porque había un córner, pero tras la tarjeta amarilla de Athekame, llamé inmediatamente a Giménez. Tenía que leer el partido: tuve suerte y me salió bien".

De esta manera, la suplencia del delantero mexicano se transformó en la anécdota central de la victoria milanista, dejando claro que su rol de "delantero de reserva" no solo es estratégico, sino también el blanco de las bromas más memorables del técnico milanista.




