Inoperante
MITO: La Selección Mexicana genera lo suficiente para ganar los partidos.
REALIDAD: El Tri es inoperante. Tiene más tiempo la pelota, pero en una zona intrascendente, manda centros que no tienen un buen destino, se equivoca en las áreas, no encuentra la portería rival y lo rígido de su sistema táctico lo hace predecible.
Esa es la actualidad del cuadro nacional. En 10 partidos eliminatorios ha generado 333 jugadas ofensivas, con 150 tiros a gol de los cuales 50 tuvieron como destino la portería y ha marcado 13 goles. Una efectividad de 3.9 por ciento. Un número bajo de anotaciones para las opciones generadas.
Además este equipo no ha conseguido manejar los partidos, se ha convertido en una escuadra que tiene que hacer largos los partidos, ocho de los 13 goles en el Octagonal los consiguió del minutos 75 en adelante.
Demasiado dramatismo, los goles tardan en caer y vive con los nervios alterados en partidos muy cerrados.
Manda 20 centros en promedio por partido, con 37 por ciento de efectividad, un recurso muy utilizado en el planteamiento del 'Tata', pero mal ejecutada.
Es cierto que tiene el balón más tiempo que el rival con un promedio de 62 por ciento por juego, ante Jamaica alcanzó picos hasta de 75 por ciento, pero está posesión del balón es estéril, en una zona donde no genera daño.
El 60.9 por ciento de los pases son laterales o hacia atrás, entre los centrales y el contención, sin claridad en el último tercio de cancha. Por juego intenta 489 pases en promedio, aunque en los dos últimos rebasó los 600. Pero de esos 498 lateral o apoyándose son 298, en una zona donde el rival no presiona y México no produce peligro.
Regresa Raúl Jiménez al cuadro titular, pero tampoco es garantía de que el cuadro del 'Tata' Martino mejore en relación a las actuaciones que han tenido Funes Mori y Henry Martín. El Lobo mexicano en cinco juego eliminatorios apenas suma nueve tiros a gol, sólo dos a portería y un gol.
CONCLUSIONES: El Tata Martino tiene problemas que tiene que resolver de forma simultánea. Recuperar el nivel futbolístico en lo colectivo y en lo individual, el objetivo es volver a la versión del equipo nacional que jugaba con una idea clara antes de la pandemia. Tendrá que replantearse la propuesta táctica, buscar algo distinto al 1-4-3-3 y además escuchar algunos nombres distintos a los que nos tiene acostumbrados.
El Tata la tiene clara, tiene un equipo que genera un importante volumen de opciones de gol por partido pero que no las mete, está convencido de que la propuesta es la adecuada, confía en que el equipo se reencuentre con el gol y se acaben los problemas.
Es una selección que vive horas muy oscuras, que busca soluciones en lo individual y no en lo colectivo. El Tri y el Tata repiten la clásica historia de nuestra selección de arrancar con grandes expectativas, jugando de forma prometedora y con el paso del tiempo ir perdiendo credibilidad de cara a la Copa del Mundo.
