CONTINUIDAD
Hasta ayer por la tarde, ninguno de los 16 dueños de los equipos de Primera División se había comunicado con el presidente de la Federación Mexicana de Futbol, Yon de Luisa, para solicitar que la continuidad de Gerardo Martino sea un tema a tratar en la reunión de propietarios que se llevará a cabo el mes entrante. Por el momento no está contemplado ese punto dentro de la agenda de los jerarcas del balompié mexicano. La Asamblea de Dueños es la máxima instancia del futbol mexicano. Dos miembros del cuerpo técnico de Gerardo 'Tata' Martino se encuentran en Qatar definiendo la logística de entrenamientos del equipo mexicano en el país sede del Mundial.
SUSPENDIDO
Por tratar de ejercer liderazgo en el gremio arbitral, el “Gato” Marco Antonio Ortiz está suspendido desde hace seis jornadas. El nazareno empezó hacer gestión entre sus compañeros para que aplicaran la 'Regla 4' correspondiente al uniforme a través de mensajes de WhatsApp y un silbante internacional llevó esos mensajes a las altas instancias de la Federación por encima de Arturo Brizio, argumentando que Ortiz pretendía ejercer como líder y en ese momento se tomó la decisión de suspender al “Gato” hasta nuevo aviso. La semana pasada tuvo designación en CONCACAF como VAR, pero en eso no tiene nada que ver la Comisión de Arbitraje. Desde que pasó lo de la huelga de los silbantes, la Federación no quiere saber nada de líderes dentro de los árbitros y para ello cuenta con algunos silbantes afines o “sapos” que les informan todo lo que pasa ahí adentro.
NO SE PUEDE
El empresario mexicano Javier San Román está a punto de comprar al Municipal Grecia de Costa Rica, lo único que ha detenido la negociación es el hecho de que FIFA prohíbe que un propietario de un club pueda ser el entrenador, por ello se busca la forma de cubrir ese requisito, ya que San Román debutó la semana pasada como entrenador y quiere seguir dirigiendo. Todo apunta a que será la esposa de San Román la que aparezca como dueña, mientras Javier sea el timonel. El precio de la operación ronda el millón de dólares y en este caso Javier lo compraría solo sin su padre Fernando y su hermano Santiago que lo habían acompañado en anteriores proyectos como Alebrijes e Irapuato.
