La mente en la cancha: ¿No supimos manejar la presión?

Alejandro Molina Bortoni

Experto en psicología y desarrollo humano que trabajó con la Selección Mexicana durante el proceso de Ricardo La Volpe. Molina llevará los lectores todo lo relacionado a la psicología y el deporte.

La mente en la cancha: ¿No supimos manejar la presión?
La mente en la cancha: ¿No supimos manejar la presión? | La mente en la cancha: ¿No supimos manejar la presión?

Alejandro Molina Bortoni

Experto en psicología y desarrollo humano que trabajó con la Selección Mexicana durante el proceso de Ricardo La Volpe. Molina llevará los lectores todo lo relacionado a la psicología y el deporte.

Terminó el sueño de la Selección Mexicana en el Mundial Sub 20. Los Argentinos nos derrotaron en cuartos de final en el torneo juvenil de la FIFA que se llevó a cabo en Chile.

Según Ricardo La Volpe, nos faltó “cancherismo” para manejar la presión. Para él, los sudamericanos contrarrestaron la línea de cinco mexicana con inteligencia y adaptabilidad, regalando la posesión pero bloqueando espacios y oportunidades.  

Basaré la propuesta de hoy en el análisis de La Volpe, para sugerir algunas alternativas para entrenar a nuestros equipos a manejar la presión.

  • Visualización guiada:

Este ejercicio sirve para acostumbrar la mente a los escenarios de alta exigencia antes de vivirlos. Para ello, antes de los partidos, los jugadores cierran los ojos y visualizan momentos críticos (penales, errores, gol en contra) imaginando que se mantienen serenos y responden con eficacia.

  • Manejo del diálogo interno:

Cada jugador elige una palabra o frase corta (“confío”, “fluidez”, “ahora”) que activa calma y enfoca. Son palabras clave de anclaje y deben repetirse mentalmente antes de un saque, penal o jugada decisiva.

  • Reestructuración cognitiva:

En sesiones grupales, se analizan pensamientos típicos bajo presión (“no puedo fallar”, “si perdemos es mi culpa”) y se reemplazan por versiones funcionales (“haré mi trabajo con decisión”, “somos un equipo”).

  • Círculos de confianza:

Espacios breves de conversación donde los jugadores comparten lo que sienten antes o después de cada partido. El objetivo no es dar una “terapia”, sino normalizar la presión y crear empatía entre los compañeros compartiendo sentimientos y efectos del estrés.

  • Rituales colectivos:

Tener una canción, frase o gesto que simbolice unidad y propósito común antes de saltar al campo. Repetir rutinas conocidas reduce ansiedad porque da sensación de control y pertenencia.

  • Regulación fisiológica del estrés:

Practicar frecuentemente la respiración cuadrada (4-4-4-4) Inhalar 4s → sostener 4s → exhalar 4s → sostener 4s para aprender a regular la fisiología.

  • Recordar el “para qué”:

Enfatizar el propósito más allá del resultado: representar a nuestro país, demostrar crecimiento, disfrutar la oportunidad. El foco en el significado amortigua el miedo al error.

Estimados lectoras y lectores, entrenemos a nuestra mente para enfrentar situaciones de presión, desarrollemos una narrativa positiva sobre el estrés y no permitamos que impacte de manera negativa en nuestros equipos y familias.  

“Revitalízate, vuelve a la esencia de lo que te da el éxito”.