En China, ser influencer ya no basta con tener carisma y seguidores. Si quieres hablar de medicina, leyes, educación o finanzas, más te vale tener un título colgado en la pared… o mejor ni empieces. El gobierno anunció que los creadores de contenido deberán comprobar estudios, certificaciones o experiencia antes de abrir la boca (o el canal).
La nueva medida, impulsada por la Administración del Ciberespacio de China (CAC), obliga a influencers a mostrar públicamente sus certificados profesionales si quieren seguir creando contenido sobre temas “especializados”. O sea, si no eres médico, adiós a los tips de salud; si no eres abogado, guarda tu opinión sobre las leyes; y si aprendiste de finanzas en TikTok… ni modo.

Plataformas también tienen chamba
No solo será responsabilidad de los creadores, también las plataformas deben verificar que todo esté en regla antes de dejar que alguien suba videos “profesionales”. Nada de improvisaciones, ni consejos de salud sacados de Google, ni tutoriales legales con voz de robot. Ahora todo será con estudios comprobables o no será.
La CAC dio un ultimátum: los influencers tienen dos meses para comprobar sus credenciales. De lo contrario, sus cuentas podrían quedarse más vacías que un live sin donaciones.

Control vs libertad de expresión
Aunque muchos celebran que por fin alguien le ponga un alto a los "todólogos digitales", otros temen por la libertad de expresión. ¿Quién decide qué opinión vale o no? ¿Qué pasa con las voces que, sin un título, aportan experiencias útiles?
“El objetivo es combatir la desinformación”, señalan las autoridades. Pero en redes hay opiniones divididas: unos aplauden la medida, otros dicen que es solo una forma elegante de callar bocas incómodas.

“Link en mi bio” ahora será “Título en mi pared”
Este movimiento no es nuevo. En años anteriores, China prohibió transmisiones en vivo de menores de edad después de las 10 p.m., y censuró contenido considerado “problemático”. Pero ahora van con todo contra quienes hablan sin diploma en mano.
Las nuevas reglas solo permitirán que influencers afiliados a instituciones educativas, médicas o de investigación hablen de temas técnicos. Así que ya lo sabes: si en China quieres opinar en redes… primero, preséntame tu cédula.





