Otra de las selecciones debutantes, aunque más conocida para la mayoría de los aficionados gracias a su presencia en Sudáfrica 2010, es el equipo de Eslovaquia.
Surgida tras la ruptura de Checoslovaquia en 1993, esta selección busca labrarse logros propios como país independiente, pues la FIFA determinó que sus éxitos anteriores se le adjudiquen a la República Checa.
En 2010 logró por primera vez su clasificación a una competencia importante, ahí comenzó su ascenso y se podría decir que hoy cuenta con la mejor generación de su corta historia como selección, uno de los motivos por los que ha logrado clasificar a su primera Eurocopa.
Equilibrio en todas las líneas es su característica. Jan Mucha no es un arquero célebre, pero cumple bien sus funciones; Skrtel comanda bien la zaga; Hamsik es el dueño del mediocampo y adelante Nemec no ha desentonado en momentos importantes.
El sólo hecho de estar en Francia ya es un logro para esta selección que con cada minuto, punto y victoria añadirá una línea más de éxitos a su historia.




