Mejía Barón, el gran líder del 93'

Mejía Barón, el gran líder del 93' | RICARDO FLORES |

KARLA UZETA | ALVARO CRUZ

Un líder nato, un técnico que con su carácter abrió el camino a la Selección Mexicana para pasar del oscurantismo a la luz, con base en el espíritu, la garra, lucha y buen futbol.

Miguel Mejía Barón defendió a capa y espada sus ideales y llevó a la Copa América un equipo novato, pero con hambre de triunfo, que superó los límites históricos del balompié mexicano.

"Fuimos invitados, una gran oportunidad para el futbol mexicano; te puedo decir que en ese momento no conocíamos el nivel exacto ni sabíamos de la envergadura e importancia de ese torneo, pero fuimos con mucha confianza en nuestras posibilidades sin pensar en el rival, y teníamos confianza que éramos un buen equipo porque habíamos hecho una gran eliminatoria”, señaló.

El partido ante Colombia marcó el debut mexicano en el certamen, con una derrota derivada de un balón que no rebasó la línea de gol y fue dado como tal.

"Fuimos con la idea de jugar y ser grandes rivales; la situación no empezó bien porque con Colombia perdimos, pero después fuimos imponiéndonos, la primera fase no fue fácil porque pasamos apenitas, pero después nos fuimos manifestando y la gente nos empezó a respetar”, afirmó.

Sin embargo, do empates le dieron a México el pase a Cuartos de Final, donde empezó el verdadero torneo para los verdes.

"Fuimos creciendo, encontrándonos, conociéndonos, tomando confianza, hicimos un gran juego contra Argentina, puedo decir que fue de los mejores aunque empatamos; después se nos apareció Perú y nos encontramos, recuerdo que Zague metió un gran gol, fue un marcador (4-2) que nos permitió tomar confianza; después llegamos como víctimas ante el anfitrión, Ecuador, un juego muy importante que me hace recordar el gol de piquetito de Ramón (Ramírez), dejando claro su aporte viniendo de atrás; fui muy criticado por eso, pero lo importante era el descontrol que podía generar en un jugador las críticas por su puesto, y por eso me agradó su gol porque certificaba muchas cosas”.

La Final contra Argentina terminó con derrota mexicana: "Sabíamos de la jerarquía de los participantes pero nunca habíamos tenido oportunidad de jugar en ese equipo, entonces fue un buen reto, y afortunadamente los resultados fueron agradables. Nunca me sentí héroe, si alguna vez hubo una manifestación de ese tipo fue exagerada. Me sentía parte de un grupo muy importante que estábamos tratando de cumplir con nuestra obligación, y sobre todo de divertirnos, aunque en el futbol es difícil, pero lo intentábamos”, puntualizó.