Después de ser bombardeado mediáticamente por sus salidas sociales, Vicente Matías Vuoso rompió el silencio que mantuvo durante todo el torneo y criticó a los medios que publicaron fotografías de él en un baile el domingo por la noche.
El atacante naturalizado mexicano de los Zorros, manifestó su molestia con los medios de comunicación que se preocupan más por su vida privada, que por el momento deportivo que atraviesa el club, en especifico, la salvación del equipo. Además de criticar a su directiva por ventilar en la prensa que será sancionado, sin antes hablar directamente con él.
"Obvio eso sí molesta (las declaraciones de la directiva), como muchas cosas, parece que este semestre Matías (sic) se va a un concierto y ya lo tildan de fiestero para todos lados, fui a Vallarta en una semana que no jugaba y también parece que la gente anda haciendo cosas conmigo, y que les dicen cuando quieren que las pongan y cuando no; hay que dar la cara, yo siempre vengo y doy la cara, yo también no hablo por lo mismo, porque hay gente detrás (sus hijos), lastiman a mucha gente que no tiene nada que ver.
"Soy una persona como ustedes, yo no me meto en la vida de nadie y no me gusta que se metan en la mía, porque soy un tipo que trata de no molestar a nadie, tengo mis cosas, tengo mis problemas y los trato de resolver en mi casa, no le pido ayuda a nadie", dijo.
Al cuestionarlo si tras sus acciones fuera de la cancha perjudicarían su permanencia en Atlas y las cuales se hicieron públicas este semestre, el delantero aseguró que él tiene la conciencia tranquila y que quiere concluir su contrato con los Zorros, al cual le resta un año más.
"No maté a nadie, qué hice, jugué tres partidos, no le robé a nadie, cuando entro trato de matarme, de hacer las cosas bien, yo no creo que haya hecho nada raro, pero cada quien lo toma como quiere y ya después se verá las decisiones que se toman", apuntó.
Matías espera reunirse con la directiva en los próximos días para resolver personalmente el tema, seguramente la semana entrante, ya que este jueves no asistió nadie a las oficinas de Colomos.
