ERNESTO GÓMEZ
Los Libres y Locos no querían perderse el cierre de su equipo Tigres, por lo que cerca de 20 camiones viajaron a Guadalajara con la intención de alentar al equipo de sus amores, el cual buscaba a toda costa la calificación.
Cerca de dos mil barristas marcharon por las calles aledañas al estadio, principalmente por la calle Siete Colinas, donde gritaban y cantaban: "Tengan cuidado, porque la barra más loca llegó”.
La policía de Guadalajara fue revisando a cada uno de los que ingresaban al estadio para cerciorarse que no lastimaran a ninguna persona.
Una banda de rock que puso la directiva rojinegra fue testigo de cómo aficionados felinos como rojinegros se enfrascaron en una bronca antes de comenzar el encuentro, donde los golpes se dieron al por mayor . La policía tuvo que intervenir para separar a los rijosos y mandarlos a su respectivo lugar en la tribuna.
Todas esas circunstancias fueron calentando el ambiente en ambos lados. Ya dentro del estadio, parte de las barras de Atlas se agredieron físicamente y duraron cerca de 20 minutos peleándose entre ellos, por lo que la policía tuvo que detener a algunos y sacarlos del estadio. Entonces los cánticos rojinegros desaparecieron y las voces de los regiomontanos retumbaron con más fuerza dentro del Estadio Jalisco.
La barra Libres y Locos salió 20 minutos antes de que finalizara el partido, con la satisfacción de ver a su equipo llevarse un valioso punto en su visita a la Perla Tapatía.
Aficionados de Atlas, acorralan y golpean a tres policías
Luego de que las autoridades del Estadio Jalisco lograran controlar algunas peleas entre las barras de Tigres y Atlas. Varios pseudo aficionados rojinegros se enfrascaron a golpes con los policías del inmueble.
En los momentos que los uniformados respondían la agresión, tres elementos quedaron acorralados a merced de la turba iracunda.
