Reinoso no se veía dirigiendo a los 70 años

Carlos Reinoso abrió las puertas de su casa para festejar con RÉCORD su cumpleaños 70 | DANIEL GÁMEZ

Carlos Reinoso cumple el sábado 70 años, está entero y trabajando en las canchas de futbol. El entrenador de los Tiburones Rojos hace un recuento de su vida y confiesa que no visualizaba esta etapa aún en el deporte, sin embargo, continúa alegre e ilusionado, pero sobre todo con la gran satisfacción de cumplir la promesa que le hizo a su hijo fallecido, volver a dirigir.

"Me siento entero a los 70 años, cuando iba a cumplir 40 dije que entrenaría hasta los 50 y nunca más me acercaría a una cancha. Uno dice cosas y termina haciendo otras", comentó el Maestro, quien confesó que la pérdida de su hijo lo llevó a querer estar de nuevo en los banquillos.

"Desgraciadamente falleció mi hijo José y se dio el regreso, ahora estoy con ilusión y alegría de cumplir la promesa que le hice de volver a dirigir para que sus hijos pudieran verme en una cancha", aseguró a RÉCORD, con la ilusión de festejar la víspera de su cumpleaños con un triunfo del Veracruz hoy ante León.

Reinoso recuerda sus años de gloria con América - Foto : DANIEL GÁMEZ

Aunque en este momento al frente de los Tiburones no se ha alejado de su familia, aceptó que visualiza su futuro y desea una vida tranquila con su seres queridos, en especial con sus nueve nietos.

"Ojalá Dios quiera llegue a más años, en dos o tres más me gustaría estar como director deportivo o asesor en la televisión y, desde luego, con mi familia. Ya quiero estar con mi nietos y tener una vida más tranquila", dijo.

El técnico de los escualos también acotó que a sus siete décadas de vida y tras los golpes, se siente más maduro que en antaño.

"Jamás pensé que perdería a mi hijo José, son golpes muy fuertes, dolores muy grandes y este tiempo en Veracruz me ha servido para reflexionar y aceptar cosas que antes no había podido", dijo.

El técnico en la sala de su casa de Veracruz - Foto : DANIEL GÁMEZ

El técnico se muestra satisfecho por todo lo bueno y malo que ha tenido en su vida, acepta que sólo le falta en la parte personal la presencia de su hijo José; en lo profesional; su mayor deseo es salvar a Veracruz y terminar su carrera "en su casa, América", afirmó.