Es toda una religión. A veces más poderosa que muchas.
Cuando salía de casa en mi época de secundaria, a principios de los noventa, mi madre me persignaba, casi siempre muy a mi pesar, para recibir la protección divina, y remataba el ritual con una frase que, estoy seguro aunque ella no lo acepte, tenía más efectividad que cualquiera: “…y que la Fuerza te acompañe”.
El universo que George Lucas inventó y mostró al mundo con la proyección de la primera película de Star Wars en 1977, el cuarto capítulo en la línea cronológica de la saga, se ha expandido como evangelio intergaláctico durante casi cuatro décadas, hasta hoy, que se estrena a nivel mundial la más reciente entrega del cautivante dogma de fantasía espacial: el Episodio VII, ‘El despertar de la Fuerza’.
Es un monumental pretexto para un evento histórico, el más grande que ha vivido la cinematografía, del que te guste o no, serás parte.
Es casi imposible esquivar el impacto de esta doctrina fabulosa amparada ahora por Disney, que la hace ineludible, cautivante, en la que ya también está inmerso tu diario deportivo.
RÉCORD rinde hoy el tributo a la continuación de la leyenda de los Skywalker, se suma al evangelio forjado por la lucha entre la luz y el lado oscuro, espadas láser y androides, saltos al hiperespacio y el inconfundible sonido de respiración de un villano icónico para muchas generaciones, Darth Vader.
Sin quemar adelanto
Al momento de escribirte estas líneas, las manos me tiemblan un poco. Sigo impactado, entusiasmado, hasta nostálgico.
Acabo de ver ‘El despertar de la Fuerza’ y te lo aseguro: no saldrás defraudado, al contrario. Si ya eres un creyente, un ‘Maestro Jedi’ de la ópera espacial (incluso si eres un lord ‘Sith’), al final de esta cinta tendrás que recoger la quijada del piso de la sala; si eres nuevo, un ‘Padawan’ en esta doctrina, te engancharás de inmediato, y te esperarán muchas más sorpresas, que podrás descubrir en los episodios anteriores. Bendito.
Te adelanto: habrá un par de chistes que quizás estén de más, pero sin importancia, eso sí: ningún personaje estilo Jar Jar Binks, esto es la esencia pura de La Guerra de las Galaxias.
Tiene toda la carga simbólica de la primera trilogía que apreció la humanidad, que es la historia que desencadena los sucesos que estás por disfrutar.
Prepárate para la experiencia fílmica del año. Ya tienes tu RÉCORD, checa los detalles de la espectacular infografía, las últimas notas de la nueva película y encuentra a los personajes clave de la saga a lo largo de estas páginas.
¿Y tus boletos? Elige la versión en 3D, es soberbia, inmersión total. Ve al baño antes, la cinta dura dos horas y cuarto, alista las palomitas y reclina el asiento. Estás por regresar, o internarte por primera vez, a un mundo sin igual.
Que la Fuerza te acompañe, querido lector, siempre.




