Supongo que en nuestro país hay muchas cosas más sucias e indecorosas que la administración del futbol. Cuauhtémoc Blanco ha sido engañando y empujado a meterse a algo mucho más impúdico y delicado en estos tiempos: la política.
No le veo ninguna necesidad de ser y lamento que una situación complicada, podría conducirle a una mucho más grave. ¿Qué hace Cuauhtémoc Blanco en la política? ¿Qué hace uno de los mejores futbolistas en la historia del país inmiscuido en temas demasiado sucios, violentos, escabrosos? ¿Qué hace ahí, cuando su experiencia y los niveles que alcanzaron su popularidad podrían ser imprescindibles para colaborar con el desarrollo del futbol mexicano que bien lo necesita?
Cuauhtémoc Blanco entenderá muy pronto que el futbol es una actividad ‘muy limpia’ en México comparada con los procederes de nuestra política y de nuestros políticos. Justo en tiempos revueltos, muy revueltos, donde no es fácil identificar y separar a los ‘buenos’ de los ‘malos’ en la cancha, algún ‘brillante’, aprovechado y ‘vivo’ ha decidido impulsarlo hacia terrenos muy delicados, donde un hombre con experiencia política tendría más condiciones para defenderse y para sobrevivir, pero donde alguien como Blanco, sea dicho esto con todo respeto, podría ser arrinconado y llevado a terrenos donde se teme por su propia integridad.
Me parece irresponsable lo que ha hecho José Manuel Sanz, representante de Cuauhtémoc Blanco, si es él quien está detrás de esto. Y me parece penoso también que la política y los políticos se presten para abusar y para poner en riesgo a personajes populares como Blanco que no cuenta, de ninguna manera, con la preparación, la sagacidad y la experiencia para ocuparse de un puesto político.
Blanco es una víctima de algunos sinvergüenzas que lo único que buscan es robarse el dinero a su nombre. Lo pueden hacer, como lo hacen muchos políticos en este México, pero no tienen derecho a exponer la vida de un personaje histórico para nuestro futbol y nuestro deporte.
Cuauhtémoc Blanco se ha metido en la ‘cueva de lobo’. Deseo, rezo e imploro para que salga de ahí sin ninguna clase de daño.
Obligados
Mientras todos los ojos siguen volteando hacia Tigres y al cómo vencer al campeón, yo creo que la temporada que arranca esta noche en el futbol mexicano está encaminada a atestiguar el despertar de dos grandes franquicias apagadas en la última época: una es Cruz Azul y la otra, aunque usted no lo crea, es Chivas.
El equipo celeste comienza formalmente la campaña con Tomas Boy. Ha adquirido tres refuerzos que deben apuntalarle en la cancha: Guerrón, Aldo Leao y el español Víctor Vázquez. No hay pretexto para Cruz Azul. Más allá de 18 años de ayuno, de los sinsabores de las últimas temporadas, es tiempo de ver hacia al frente y yo veo a este Cruz Azul peleando por el título.
Chivas mostró parte de lo que podría ser tras la llegada de Matías Almeyda. El equipo ordenó sus ideas, adelantó líneas y enseñó que tenía aptitudes para pelear por ganar los partidos. Llegó Orbelín Pineda, una joven promesa que debe crecer en Chivas, y llegó el ‘Gullit’ Peña, uno de los mejores futbolistas mexicanos la última década, que debe y puede tomar un papel protagónico en el equipo.
Cruz Azul y Chivas en la Liguilla. Eso lo menos que le podemos exigir. ¿Habrá espacio para ellos?
¿Dónde jugará el Chicharito?
Brasil anuncia que Neymar jugará los Juegos Olímpicos de Río tratando de ganar lo único que le falta ganar a Brasil en el futbol, y yo agregaría que tratando de recuperar parte del orgullo tras lo ocurrido en el Mundial del 2014.
Perfecto: Neymar va con Brasil a los Olímpicos por una cuestión natural, por una necesidad y hasta por una orden gubernamental. Con ello, estoy casi seguro, que Neymar se alejará de la famosa Copa América del Centenario que se planea jugar en junio en los Estados Unidos. Tengo dos preguntas que tiene que ver con dos estrellas, cada una en su nivel y en su tamaño y dimensión protagónica: ¿Qué torneo jugará Messi y que torneo jugará el mexicano Javier Hernández?
Me parece que Messi estará en la Copa América y que Argentina tratará de presentar un equipo juvenil competitivo en Río, y creo que lo mismo sucederá con el Chicharito. El Tri no contará con él.
